Por Edgardo Cabrera

Luego de que quedaran en suspenso la admisión de las solicitudes de 7 agrupaciones que buscan vivir de las prerrogativas al constituirse como partidos políticos, el viernes cuatro pasaron el filtro del ITE, y con ello ahora suman 14 organizaciones que tienen luz verde para celebrar asambleas constitutivas.

Solamente tres: Convicción Democrática, Vía Democrática Activa Tlaxcala y Asociación Civil Denominada Metamorfosis Unidos se quedaron con las ganas.

Tienen de plazo hasta agosto para que las organizaciones hagan sus asambleas municipales y distritales con una asistencia mínima de 0.26% del Padrón Electoral de cada demarcación. 

Algunos marrulleros como los de Encuentro Solidario, los conocemos, aprovechan los recovecos legales, y el uso de la clientela de otros para obtener su registro, nada nuevo con Garrido y compañía, van por tercera ocasión a la aventura de tener un partido, el mismo que ha sido repudiado en las urnas, de ahí la pérdida de sus registros anteriores.

Otros como los de Renovemos Tlaxcala de Santiago Sesín apostaron alto. 

Aunque en su momento dijeron que no romperían el cordón umbilical del PRD, hace un par de semanas su capital político fue sacado del Sol Azteca, entregaron la Secretaría General y otras carteras, incluso el líder nacional vino a validar los nuevos nombramientos que son producto de un pacto con un sector del extinto Partido Socialista, al instalar a Patricia Zenteno, personaje cercano a Rosalía Peredo.

ASÍ SUS CONVICCIONES

En eso de los saltimbanquis, también siguen en el proceso los del “Partido Progresista Popular”, presidido por el ex dirigente perredista, Salvador Méndez Acametitla; así como “Democracia Participativa por Tlaxcala”, donde está otro ex dirigente local, en este caso del PRI, Arnulfo Arévalo Lara, apadrinado por los “Menas”.

De los dos anteriores, sus pasos por las dirigencias partidistas fueron sin pena, ni gloria, tuvieron pobres resultados electorales, no destacaron ni por su liderazgo, menos por su voz, fueron grises, al igual que cuando fueron diputados por las siglas de las cuales se sirvieron para ocupar cargos y puestos.

Del resto de los aspirantes a partidos hay poco que hablar, no representan ni opciones novedosas o de avanzada en el plano político, son más de lo mismo, agrupaciones carentes de identidad y liderazgo social.

Por cierto, los actuales partidos políticos, de igual forma, poco aportan a la vida democrática, a la oposición o al desarrollo social. 

La chiquillada, la mayoría rémora de los partidos en el poder, que los mismo estuvieron con el PRI, que, con el PRD, el PAN y ahora Morena, simplemente viven de los jugosos acuerdos que hacen en campañas donde ofrecen un puñado de votos para permanecer en la ubre de las prerrogativas.