Desilusión y burla
27 de junio - 2018

Por Edgardo Cabrera

Este miércoles concluyen las campañas y quien brilló por su ausencia fue el primer candidato independiente al Senado en la historia de Tlaxcala, Obed Javier Cruz Pérez.

No participó en foros y tampoco dio ruedas de prensa, las entrevistas que concedió fueron contadas, su propaganda fue nula y su presencia en redes sociales es prácticamente inexistente.

Eso sí, este personaje había recibido 1.4 millones de pesos de financiamiento público y tenía gastados poco más de 674 mil pesos, hasta el segundo informe del Sistema Integral de Fiscalización del INE.

Sin embargo aun resta un tercer balance para reflejar en qué gastó los 2 millones 45 mil 872 pesos que el organismo electoral le presupuestó para su campaña y los cuales estuvieron distribuidos en tres ministraciones entre mayo y junio.

Al cierre del segundo informe, Obed había destinado la mayor parte del dinero público a la compra de playeras (242 mil pesos), micro perforados (207 mil pesos), viáticos (más de 100 mil pesos), pancartas (74 mil pesos), volantes (23 mil pesos) y perifoneo (26 mil pesos).

Lo más preocupante es que esa propaganda no se ve por ningún lado y lo único que fugazmente avistaron algunos ciudadanos fue la presencia de una combi destartalada con propaganda pegada en forma de ese conocido juego infantil llamado “gato”.

El candidato (quien no es de Tlaxcala) es la mayor decepción de los 7 independientes que compiten al senado quienes lograron su registro en los estados de Baja California Sur, Chiapas, Guerrero, Jalisco, Nuevo León y Sinaloa.

La burla

Pero si lo anterior es lamentable, la más reciente burla al estado de Tlaxcala se la debemos precisamente al nefasto spot que mandó a hacer Obed Cruz y que difundió a lo largo de su campaña en los tiempos oficiales que le concedió el INE en Radio y TV.

Resulta que Eduardo Videgaray y José Ramón San Cristóbal «El Estaca» (los bufones del programa ¡Qué importa!, que se transmite En Imagen TV) no sólo despedazaron el anuncio, sino que aprovecharon para denigrar nuestra cultura y pueblo.

No es la primera vez que estos mequetrefes se burlan de Tlaxcala, recordemos la triste historia de las escaleras eléctricas, pero en esta ocasión nadie salió al paso de la mofa, empezando por el propio candidato quien no fue capaz de emitir al menos un pronunciamiento condenando las expresiones denigrantes de eso guasones.

Descontrolada

La violencia y delincuencia en Texmelucan está descontrolada, ayer de nueva cuenta un pleito entre grupo rivales tuvo como terreno de batalla la zona limítrofe con Tlaxcala.

Fue entre Villa Alta y San Martín donde un joven fue brutalmente asesinado, al menos 30 balazos le dieron y entre las líneas de investigación no se descarta un móvil político.

Y es que resultó que la víctima era brigadista del candidato del PAN a la alcaldía de Texmelucan, Rubén Alejandro Garrido Muñoz, y que la camioneta que conducía traía utilitarios del abanderado, de ahí que el crimen fuera atraído por la Fiscalía General de Puebla.

Esperemos que para el 1 de julio se refuerce la seguridad en dicha zona limítrofe con Tlaxcala porque los focos rojos están prendidos y podrían manchar la jornada electoral en nuestro estado.