Por José Luis Ahuactzin

La designación de Luis Antonio Ramírez, como nuevo secretario de Gobierno del Estado de Tlaxcala, se convirtió en nota nacional, en la que descalifican a la gobernadora Lorena Cuéllar Cisneros como al funcionario, por modificar la Constitución local y ungir a su ahijado.

La designación publicada en medios nacionales como el Reforma, Proceso y columnistas como Ricardo Alemán, por citar algunos, han cuestionado entre otras cosas, la reforma para que sea un ‘familiar’ de la mandataria quien asumiera el cargo en el gobierno lorenista.

Adicionalmente, también señalan que el nuevo servidor público, aparte de ser el ahijado de boda, también enfrenta una denuncia por pensión alimenticia y, en el pasado, fue exhibido como deudor alimentario al dejar en el desamparo a su menor hijo.

Otros medios de comunicación, señalaron el vínculo político de Luis Antonio Ramírez con el aspirante a la candidatura a la gubernatura de Morelos, Rabindranath Salazar; y también como coordinador de campaña de la actual mandataria tlaxcalteca.

Esa designación que circula en redes sociales como en medios de comunicación nacionales, cuestionan a la gobernadora Lorena Cuéllar Cisneros e incluso son insultados, por ejemplo, en el portal de Proceso, los perfiles de Lando Karyu y Juventino Sánchez.

Otros como el de José García, opinó denunciarlo ante el presidente Andrés Manuel López Obrador, en la mañanera.

‘A ver si la reportera de proceso que va a las mañaneras lo denuncia ante AMLO y éste le manda decir a la gobernadora que lo haga pagar todo de retroactivo o locorra y… habrá que limpiar lo que vata dejando al camunar a pagarle a la exesposa’.