CHAMBONES
26 de abril - 2021

Por Edgardo Cabrera

Esta semana se cumple el primer mes de campaña por la gubernatura y las diputaciones federales, lapso en el que la mayoría de los dirigentes de los partidos políticos simple y sencillamente han nadado de muertito, y en algunos casos, siguen poniéndole el pie a sus candidatas.

En el PAN, por ejemplo, Miguel Ángel Polvo está más ocupado en la campaña de su esposa en el distrito IX, que en apagar los fuegos que se mantienen ardiendo en su partido; en la capital son los azules quienes se han convertido en el principal lastre de la virtual candidata Claudia Pérez, pero no es el único caso, en Apizaco otro grupo de panistas le dieron la espalda a Pablo Badillo y andan operando para el PRD y PRI.

Detrás de la impugnación contra el registro de Omar Milton, quien busca la reelección en el distrito VII, se encuentran panistas incrustrados en la dirigencia estatal; en la Magdalena Tlaltelulco despreciaron a quien tiene amplias posibilidades de ganar, se trata de Rocío Meléndez Pluma, una de las fundadoras de Acción Nacional en ese municipio.

Resulta que fue la síndico del entonces alcalde Miguel Ángel Polvo, en ese lapso alzó la voz ante una serie de irregularidades y eso derivó en que ahora le cerraran el paso. Está inscrita por Fuerza por México y tiene amplias posibilidades de ganar.

Y la lista sigue, varios alcaldes que no han querido salir a sumarse con la candidata a la gubernatura Anabell Ávalos están enojados por el desprecio de su partido, unos más, como el de Tetla, de plano renunciaron al partido y se fueron a Morena.

SOLO EN FOTO

Hay otros más que solamente aparecen cuando se trata de la foto, es el caso del priísta Noé Rodríguez. Está bueno para levantar la mano de la candidata a la gubernatura cada que la ocasión lo amerita, pero en el trabajo de cicatrización de heridas deja mucho que desear, ahí está Gardenia Hernández en Tlaxco, por ejemplo.

Pero la simulación del apoyo es más evidente cuando en los hechos destaca su silencio al momento de defender a la candidata, es ahí donde las panistas Minerva Hernández y Adriana Dávila han salido a dar la cara, ambas, por cierto, distanciadas de su dirigencia.

Del PRD ni qué decir, Julio César Pérez es un cero a la izquierda -literal-, no habla, y cuando habla tartamudea, y cuando hace precisamente eso, tropieza y no ayuda en nada ni a su partido, menos a sus candidatos, sino fuera por Santiago Sesín a Juan Manuel Cambrón, desde hace mucho algunos depredadores que están dentro de la coalición Unidos por Tlaxcala los hubieran desaparecido, de hecho, en estás tres semanas han sido ninguneados en varias ocasiones.

El del PACSerafín Ortiz dejará de lado su tarea de dirigente porque la capital del estado, donde es candidato, le ameritará toda su energía y atención.

La del PSPaty Zenteno parece relegada de la toma de decisiones, aunque meses atrás fungió como vocera la coalición, una vez que arrancó campaña la olvidaron, como ocurre con el PRD, parece que los socialistas fueron desplazados.

NI PICHAN, NI CACHAN

En Morena, de plano ni tienen dirigente, y la falta de un liderazgo partidista que coordine los esfuerzos ha dado como resultado las decenas de aspirantes a una candidatura que se han ido, y otros más que están próximos a fugarse.

No hay operación cicatriz, porque no existe quién lo haga, el gran problema es que dentro de morena hay muchos generales que dan órdenes y contraórdenes, ese desastre le ha generado problemas a Lorena Cuéllar donde antes no tenía, y los que tenía, se le siguen incrementando por la falta de un líder en Morena.

En el PT Silvano Garay mantiene un control férreo de los suyos, es de los pocos dirigentes que han sabido apagar fuegos de una forma radical: los extingue; a los enanos no los deja crecer y solos terminan por irse, ahí están, por ejemplo, Michaelle Brito y Víctor Castro, son problema ahora en Morena.

En el Verde pasa algo similar, Jaime Piñon lleva años al frente del partido, mantiene el control con el respaldo de la dirigencia nacional, y cualquier intento de traición es sancionado con la expulsión “voluntaria”. Al igual que Silvano, traen amarradas diputaciones para ellos.

El partido Encuentro Social Tlaxcala con José Luis Garrido está condenado al fracaso y desaparición, la dirigencia es una rémora para Lorena Cuéllar, simplemente se cuelgan esperando supervivencia ya que al interior viven un grave conflicto por candidatos poco competitivos y desplazados.

En Encuentro Solidario, Redes Sociales Progresistas, Impacto Social Sí y Fuerza por México sí, hay destellos de liderazgo, no es para menos, se juegan su permanencia como partidos y se han convertido en un soporte para sus candidatas y candidato a la gubernatura, lo mismo atajan golpes que han dado la cara en algunos casos donde sus aspirantes al gobierno no han dado el ancho en la campaña, tal es el caso del PES donde el alto nivel de algunos de sus abanderados como en el distro 1 federal, contrasta con la falta de preparación para la competencia más importante.