COMO LOMBRICES
28 de mayo - 2019


Por Edgardo Cabrera

Lo dicho, los levantadedos locales andan felices como lombrices, y es que el ejecutivo estatal modificó las reglas de operación de los fondos “moches” y con ello cerrar así un capítulo más de desencuentros entre ambos poderes.

Algunos candados como la aportación obligatoria que tenían que hacer los alcaldes para acceder al Fondo de Acciones para el Fortalecimiento al Campo y al de Fortalecimiento de Obras y Acciones a Municipios, fueron eliminados.

También fueron agilizados los trámites administrativos por parte de la Secretaría de Finanzas para concretar los convenios con los ayuntamientos y así aterrizar los 425.5 millones de pesos que fueron etiquetados discrecionalmente por los legisladores.

Y de acuerdo con lo pactado, desde esta semana los calientacurules podrán llegar a los municipios como Santa Clauses para hacer caravana con sombrero ajeno, y es que no olvidemos que ese dinero no es de su propiedad, sino del erario.

Ya lo citaba la semana pasada en este mismo espacio, las quejas y berrinches se habían enmudecido porque ya afilaban las garras del acuerdo que venían trabajando, el que por cierto no será gratuito… al tiempo.

BESAMANOS 4T

El viernes el presidente López Obrador estará en Apizaco y los lorenistas ya se disputan la “paternidad” del acto que será uno más de los mítines presidenciales que se realizan para entregar los recursos de los apoyos sociales que administra la Secretaría del Bienestar.

No habrá mayores sorpresas ya que como en la ocasión anterior la virreina alentará a su resentida camarilla para que organicen rechiflas en contra del gobernador Marco Mena, y que se desgañiten en hurras a la coordinadora de programas sociales (para tapar sus torpezas), en espera de que Andrés Manuel se los celebre.

Pero igual que hace cuatro meses, el ejecutivo federal apapachará al mandatario en privado y público, pero también dejará correr las protestas de los suyos. Nada nuevo en el circo.

Más allá del morbo que ocasiona la visita presidencial, la realidad es que López Obrador llegará a un estado donde existe un marcado divisionismo entre los Morenos y Cuéllar; también donde las becas de “Jóvenes Construyendo el Futuro” fueron privilegiadas a diputados y alcaldes, en lugar de a la IP; de igual forma donde la entrega de los recursos se ha retrasado por la incompetencia en la integración de los censos, y donde se privilegia el protagonismo de la corte virreinal por hacer precampaña en lugar de actuar como gobierno.

Ah, y la cereza del pastel, arribará a la entidad donde los legisladores locales de la 4T no son austeros ni transparentes, además de asignarse dos fondos “moches” para entregar recursos clientelares para su conveniencia, cuando la orden era la de simplemente hacer su labor: legislar.