EL CHAMBELÁN
24 de enero - 2019

Por Edgardo Cabrera

José Antonio Álvarez Lima aprovechará el informe legislativo que ofrecerá el domingo, junto a Ana Lilia Rivera, para despedirse de la curul y, cual chambelán, simplemente actuará como compañero de baile de quien tiene -cada vez más- posibilidades de ser la próxima candidata a la gubernatura por Morena.

Ayer el presidente López Obrador confirmó lo que adelantamos desde la semana pasada en este espacio, el senador abandonará la curul para integrarse como director del canal gubernamental Once.

Aunque no faltan los aplaudidores y lambiscones del ex gobernador, lo cierto es que la llegada de este longevo personaje a la televisora preocupa, basta leer lo escrito la semana pasada por Mauricio Hernández en su columna. http://gentetlx.com.mx/2019/01/17/canal-once-el-premio-a-la-desmemoria/

Su estancia en lo que fue Imevisión no es de presumirse (como algunos lo quieren ver), la realidad es que su pasado salinista no se puede ocultar.

En ese periodo no sólo se desmanteló esa televisora estatal y se entregó a la “mafia del poder” para crear TV Azteca, sino que después, al frente del ejecutivo de Tlaxcala, aumentó el número de municipios, creó un cuarto nivel de gobierno (abultando con ello la burocracia estatal), puso en crisis el sistema educativo y surgió el MBM, amén de otras tantas cosas más.

Ahora, en su resurrección política, ya vimos que no le fue suficiente la senaduría, por lo que a la primera de cambio mandó al diablo la representación de los tlaxcaltecas y no siguió el ejemplo de su correligionaria, la diputada federal Tatiana Clutier, por lo que aceptó de inmediato el puesto en el gabinete de AMLO.

Ya veremos si su llegada a Canal Once no es un mal presagio para la televisora del IPN que se ha convertido en la más importante del estado mexicano, con producciones y una programación que compite a empresas privadas como Televisa, TV Azteca e Imagen.

MALAS NOTICIAS

A colación del tema, a más de uno dentro de Morena les brillaron los ojitos ante la inminente llegada de Joel Molina al Senado de la República en suplencia de Álvarez Lima.

Y es que ya daban por descontada la renuncia del ex priísta a la dirigencia estatal de Morena, sin embargo todo apunta a que no habrá ningún cambio por lo que a la par de estar en la Cámara Alta del Congreso de la Unión, se dará tiempo para seguir administrando el partido en Tlaxcala.

Los primeros en pegar el grito fueron los vasallos de la virreina quienes ya afilaban las uñas para hacerse de esa posición y con ello empezar a trabajar en el reparto de las candidaturas para la próxima elección estatal.

INCERTIDUMBRE   

Ante la incertidumbre que se vive en las delegaciones del gobierno federal y los despidos de personal sin el pago de los finiquitos correspondientes, ya se alistan una serie de protestas, así como la toma de algunas de estas oficinas públicas.

Recordemos que personal de estancias infantiles fueron los primeros en expresar públicamente su enojo y preocupación ante el cierre de recursos, así como la falta de información sobre la permanencia de este programa que maneja la Sedesol en beneficio de madres trabajadoras.

A lo anterior se suma el malestar de personajes que han pasado de forma efímera con la encomienda de “encargados de despacho” de delegaciones, a los cuales no les han pagado ni un quinto y, no sólo eso, sino que fueron removidos en cuestión de horas porque no contaban con el aval de los secretarios de estado para ocupar esas posiciones.