Por Mauricio Hernández Olaiz

En México como en Tlaxcala, en las acciones de gobierno, campañas políticas y muchas otras áreas de la vida pública y económica, la simulación ha sido, y será, una herramienta valiosa para la supervivencia de individuos de nula ética, oscuros, patógenos, pero con una capacidad de embaucar y engañar altamente desarrollada y, sorprendentemente, con una gran credibilidad; pese a que se les puede comprobar una y otra vez su constante simulación.

Pero empecemos por lo primero, para no errarle y tratar de descifrar este entramando simulador.

¿Qué es la simulación?

Hasta el latín hay que marcharse para encontrar el origen etimológico del término simulación que ahora nos ocupa. Y es que emana de la unión de dos componentes léxicos latinos: la palabra “similis”, que puede traducirse como “parecido”, y el sufijo “-ion”, que es equivalente a “acción y efecto”. Simulación es la acción de simular. Este verbo refiere a representar algo, imitando o fingiendo lo que no es.

La definición de la acción de simular es “representar o hacer creer algo que no es verdad con palabras, gestos o acciones”. Presentar una cosa haciendo que parezca real aunque no lo es.

No son pocas las acciones de gobierno en las que la simulación es el gran protagonista, los artífices del ilusionismo propagandístico llevan y traen engaños tan descarados pero con un velo de aparente realidad en la cual muchos caen atrapados.

Hay simuladores de todos tamaños y en todas las ideologías partidistas de las grandes ligas de la política, uno es sin duda Andrés Manuel López Obrador, Felipe Calderón, Santiago Creel, Osorio Chong, Peña Nieto, Videgaray y por supuesto el alumno más adelantado Aurelio Nuño.

Y es Nuño precisamente el mejor ejemplo de la simulación y el ilusionismo en su secretaría que es la de educar al pueblo de México. Varios spots de los “enormes” avances de la SEP pueden ser vistos tanto en televisión abierta como en la de paga, alumnos bien uniformados, peinaditos, salones de clase pulcros y adecuados para la enseñanza primaria, por ahí sale el secretario saludando a docentes y alumnos por igual, la SEP se fortalece y la imagen presidencial de Nuño también.

El pasado viernes 8 de julio de este apretujado 2016, desde temprana hora, cerca de las 4:00am comenzaron a llegar a la escuela primaria “Mariano Sánchez” en la calle de Emiliano Zapata en la Trinidad Tepehitec Tlaxcala, una gran cantidad de camiones, remolques y demás transportes especializados de equipos de filmación y luces, hasta el tradicional carro de corte a comer estaba presente.

Lógicamente entre los vecinos, incluido el que esto escribe, nos llamó la atención el movimiento desde tan temprana hora, finalmente nos enteramos que la SEP filmaría un nuevo comercial de su exitosa campaña en las aulas. Pese a la llegada de las tradicionales suburbans a eso de las 7:00 am y de la presencia de escoltas, nos fue imposible confirmar o comprobar la presencia del secretario del momento Aurelio Nuño, unos decían que si estaba otros que no…

Pero el hecho de que filmen otro comercial propagandístico no es relevante, lo que sucedió después me parece si lo es y es parte de esa eterna materia de la simulación gubernamental.

Cerca del mediodía comenzaron a guardar todos los equipos, al parecer la filmación había concluido, pero cuando se comenzaron a sacar, empacar y guardar los pupitres nuevecitos, pizarrones digitales y mobiliario escolar de primera fue cuando la sorpresa en un servidor fue mayúscula, ni siquiera el pago a la escuela fue dejarles el mobiliario nuevo, ese es tan solo parte de la simulación, del ilusionismo político, para que a sus hogares llegue el anuncio de escuelas bien equipadas lo que está bien lejos de la realidad, la escuela “Mariano Sánchez “ se quedó con sus pupitres, escritorios y pizarrones viejos pero con la satisfacción de haber sido parte de la campaña propagandística del titular de educación.

Por acá también los Hay.

Tlaxcala no es ajeno, claro está, de los simuladores de alta escuela, para muestra dos de ellos incrustados en la campaña, ahora de protesta, de Lorena Cuéllar. Esos simuladores que le hicieron creer a la ex aspirante que las encuestas le favorecían y que había que usarlas como herramienta propagandística, que le trajeron a Graco como el Superman de las victorias y que le juraron y perjuraron que tienen la información fidedigna de que Marco A. Mena rebasó los topes de campaña hasta en un 83%, con ello le simularon una nueva elección y que en esa se levantaría como la gran triunfadora que es.

Pero para el INE todo esta bien en Tlaxcala, el Priista no rebasó los topes de campaña; ¿simularon otra vez Cánovas y Herrera Murga?, conociéndoles claro que sí, lo increíble es que Lorena les siguió creyendo todo, se volvió una víctima de la simulación de su equipo y su principal fundamento para tirar la elección simplemente desapareció, como las verdades de sus operadores, claro está, que el INE también sabe simular…y bastante bien.

Finalmente todo lo que le han dicho a Lorena fueron simple simulación electoral, al grado de que no pudieron tener representantes en todas las casillas como se lo aseguraron a la candidata amarilla en su momento, pero como buenos simuladores le echaron el paquete al PRD cuando ellos desde un principio exigieron tener el control de los operadores y representantes generales y de casilla. En el dictamen del INE relativo a las sanciones a candidatos y partidos sobre rebases de topes de campaña, ni por equivocación mencionan a Mena Rodríguez.

En el México mágico de la eterna simulación cualquiera puede afirmar lo que sea si tiene las herramientas, presupuesto y por supuesto los medios necesarios para simplemente representar o hacer creer algo que no es verdad. A unos Lorena les creyó, a otros hasta el pueblo… ¿Se encarrera Nuño en serio para la sucesión del 2018 o es mera simulación?