Tensión en el 7 de Mayo; ex líder desconoce a Tlapale e impone a su hija 
5 de agosto - 2014

7mayo

Tlaxcala| Manuel Morales.- Trabajadores burócratas adheridos al sindicato «7 de Mayo», se agredieron verbalmente la tarde de este martes para defender, por una parte, al actual líder Edgar Francisco Tlapale, y otros, considerados como disidentes, que protegen los privilegios que gozaba la familia de los Erazo-Rivera al interior del mismo sindicato.

El conato de bronca se dio derivado de que el grupo de la ex líder Guadalupe Rodríguez Guzmán desconocieron a Tlapale como líder y nombraron a su hija Karina Erazo, incluso amagaron con instalarse en las instalaciones sindicales, por lo que arribaron antimotines para inhibir cualquier agresión entre ambos grupos.

Aunque se registró daño al edificio, no pasó a mayores y se mantiene la seguridad pública resguardando el inmueble; por momentos la circulación de la avenida Guillermo Valle de la capital del estado, fue cerrada por la tensión en los ánimos.

La protesta se dio una vez que le fueron retirados los privilegios a la familia de los Erazo-Rivera del Comité Ejecutivo del sindicato «7 de Mayo», la ex dirigente Guadalupe Rodríguez Guzmán, reunió a su base de seguidores para tomar el edificio y nombrar a su hija Karina Erazo Rivera como líder del gremio.

A la ex dirigente le molestó que a ella, a su esposo y sus dos hijos fueran boletinados y retornados a su centro de trabajo para cubrir los horarios laborales, retirándoles cualquier comisión sindical, por lo que de urgencia este martes inició con la organización de la toma del edificio.

El Secretario General del sindicato de burócratas, Edgar Francisco Tlapale boletinó a estos ex líderes sindicales y seis de sus allegados para difundir que carecen de cualquier tipo de representación.

En este sentido el dirigente emitió un oficio a los trabajadores sindicalizados para que de «carácter urgente» se realizara una reunión en su sede sindical para exponer los pormenores de esta situación.

Por la disputa del edificio y de la representación, la policía estatal intervino para resguardar la sede del  «7 de Mayo» y garantizar la paz y tranquilidad.