Congreso: política de impunidad y no austeridad
12 de abril - 2019


Por José Luis Ahuactzin

Estamos en el octavo mes del primer año de ejercicio legal de los 25 jilgueros de la calle Allende, y lo que han confirmado en su labor como legisladores es mantener una política de impunidad.

Los diputados locales no sólo han pisoteado la legislación interna sino la propia Constitución local con tanta iniciativa de reforma que en este año ha superado la veintena de ocurrencias.

En materia de transparencia de gasto público y rendición de cuentas, son más opacos que su propia página de transparencia porque no está actualizada con las publicaciones a que les obliga la ley de transparencia y acceso a la información.

Esconden sus declaraciones patrimoniales 19 de 25 levanta dedos porque sólo 6 lo han hecho, y eso, a medias o con mentiras: Lourdes Montiel Cerón, Maribel León Cruz, Michaelle Brito Vázquez, Omar Milton López Avendaño, Guadalupe Mata Lara, y Zonia Montiel Candaneda.

En cumplimiento a la agenda legislativa, ni para disimular y mentir se ponen de acuerdo, porque mientras la presidenta de la Mesa Directiva, Mayra Vázquez Velázquez señala que no han llegado al 50 por ciento; el presidente de la Junta de Coordinación y Concertación Política (JCCP), Víctor Manuel Báez López, perjura que han superado el 60 por ciento.

A cinco meses del nombramiento del titular del área de comunicación, David Rodríguez Silva, sin perfil y sin título, se mantiene en el cargo violentando la legislación que exige ser profesionista en el área de Ciencias de la Comunicación; eso sí protegido por la petista Yordana Garay, hija del dueño de la franquicia llamada PT, Silvano Garay; por cierto gris en su labor legislativa en la Cámara baja al igual que su pupila en el Congreso local.

Y para cerrar con broche de oro, entre otras pifias más, se asignaron más de 50 espacios de manera discrecional del programa del gobierno federal “jóvenes constituyendo el futuro”, de la Secretaría del Bienestar.

Con todas estas acciones, de las que ya han sido señaladas como ejemplo, las tres leyes y dos Decretos vetados por el titular del Ejecutivo, mantienen los levantadedos una política de impunidad, y no de austeridad.