Por Mauricio Hernández Olaiz

Lorena Cuéllar salió de su burbuja por primera vez desde que es gobernadora. Dejó su zona de confort, esa que le es habitual, en donde solo hay pachanga, pirotecnia, aplausos y caravanas.

Y salió para visitar el Hospital Regional Emilio Sánchez Piedras. Llegó de sorpresa, pero al final la sorprendida fue ella. El golpe brutal con la realidad no le gustó, ese golpe que la hizo trastabillar y que por nadita la manda a la lona, esa realidad que en nada se asemeja a lo que ha estado acostumbrada por casi dos años al frente del gobierno.

Al percatarse de la llegada de la jefa del ejecutivo, los trabajadores de la salud y familiares de los pacientes que se encuentran recibiendo atención médica, le recriminaron cada una de las carencias que se tienen en el nosocomio. Con una improvisada hojita, Lorena tomaba apresurada nota de los múltiples faltantes, las peticiones eran interminables. Lámparas para el área de quirófano, las máquinas de anestesia, equipo instrumental y consumibles, oxímetros,  glucómetros, baumanómetros, medicamentos, equipo de cómputo, impresoras y un largo etcétera.

Las peticiones seguían y la mandataria ya había llenado su hojita, con letra ininteligible, por lo menos para un servidor, espero que ella entienda su propia letra. Desesperada soltaba preguntas al personal…¿dónde están los 1200 elementos que contratamos?, Aquí no, le respondieron, por el contrario, nos falta personal manifestaron. Cuesta creer que la gobernadora no tenga ni idea de cómo operan las dependencias a su cargo.

Abrumada optó por tomar las de Villadiego, subió a su poderosa camioneta y abandonó el lugar, no sé si jurando nunca más llegar de improviso a algún lugar, sin ese cobijo que le dan, sin esa protección y apapacho que le brindan en sus eventos a modo.

Lorena se vio de frente con el Tlaxcala de todos, con el Tlaxcala que juró representar y hacer crecer, con un Tlaxcala que no conocía y del que no tiene ni idea…

La gobernadora piensa que los enemigos de su gobierno, los que comprometemos su terso paso por la historia somos los críticos, los que señalamos sus yerros, pero no, por fin Lorena tiene elementos para darse cuenta que sus verdaderos enemigos son los que tiene a lado, los que le hablan al oído solo para endulzarlo, para venerarle, los que le cuentan mentira tras mentira, los que la abrazan esperando la oportunidad de apuñalarla, los que solo trabajan para sus propios intereses de dinero, poder, influencias, de esos le sobran a Cuéllar Cisneros.

Y es que en verdad que daño le hacen a Lorena Cuéllar los miembros de su equipo, esos que todo le aplauden, esos que le dicen que es la mejor gobernadora del mundo mundial, del universo conocido y por conocer, esos que todo le vitorean, que le caravanean y que la hacen sentir única.

Pero no lo es…en el Sánchez Piedras, precisamente en el día del luctuoso del ex gobernador, Lorena se percató de lo que es vivir en una burbuja y de lo lejos, muy lejos que está de la realidad.

Ya no parecía un asunto político, como días antes aseguró que era, ahora estuvo de frente con hombres y mujeres de carne y hueso, que le suplicaban no tomar represalias, que solo piden ayuda de la persona por la que votaron y confiaron para darles más y mejores oportunidades de vida y desarrollo.

Lorena salió de su burbuja y no le gustó. Ahora solo hay de dos, seguir jugando a hacerse como el tío Lolo dentro de su universo personalísimo conocido como Lorelandia, seguir ahí los 4 años que le restan sin importarle lo que en verdad vale la pena, o seguir saliendo a la realidad, por dura que parezca y en verdad tomar manos a la obra para construir su nueva historia. Hoy sigue siendo triste, tristísima.

Depende solo de ella…

Ya lo dijo el ex gobernador Ortiz, “Ahí la lleva”, pero solo para superarlo como el peor gobernador de toda la historia. De seguir Lorena en su burbuja no tengo la menor duda que al dejar el poder será la peor gobernadora de todos los tiempos, pero también es cierto que aún está a tiempo de recomponer el camino, de dejar su soberbia, su avaricia, su sordera, su piel sensible, para comenzar a trabajar de la mano de los ciudadanos, cortar de tajo con aquellos que solo la veneran por intereses personales y rodearse de perfiles expertos que privilegien el amor por Tlaxcala.

Ya veremos…No se necesita mucho tiempo para saber cuál camino eligió.

¿Burbuja o realidad?…. ¿Usted cuál cree que elegirá? Los leo.

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