Evidencian con fotografías claras y notorias diferencias entre autores materiales y detenidos; en un caso la detenida es oriunda de Oaxaca y en el otro de Guanajuato

Por José Luis Ahuactzin

Un grupo de madres y padres de familia, conformaron un frente ‘por el derecho a la verdad’, en el que señalaron una serie de anomalías procesales y la presunta fabricación de delitos, que retardan la justicia y tienen en prisión a sus hijos e hijas.

Casos como el de Pedro N, quien fue detenido en Guanajuato y trasladado a Tlaxcala, señalado de cometer el delito de homicidio y solo porque el homónimo de su nombre y apellidos coincidió con el señalamiento, fue remitido al Cereso, sin mayor investigación y pruebas del delito.

Sobre este caso, la activista Yenny Charrez Carlos, dijo que el principal sujeto que señaló a Pedro como homicida, está fugado de la justicia y  a la fecha no se ha presentado a declarar porque huyó, y Pedro sigue detenido.

Otro caso es el de Karla, quien era fiscal en el Estado de Puebla, ahora acusada de ser la autora material de feminicidio ocurrido en una guardería del ISSSTE, en el Sabinal, Tlaxcala, en junio del año 2019; pero fue vinculada porque según fue quien mató, pero en los hechos y con evidencia plena se identificó a una mujer delgada, morena y de cabello lacio; lo que no concuerda con las particularidades de Karla, pues ella es de tez morena, de estatura baja y cabello chino.

La madre de Karla, señala que su error fue haberse involucrado con el sujeto que, desde su perspectiva es el verdadero autor del feminicidio, pues su hija días previos había terminado la relación sentimental y, al terminarla, fue víctima del mismo sujeto ya que la agredió y tiró sobre la carretera.

Por si fuera poco, otro caso de violación procesal fue evidenciado, se trata del de Maricela Parada, acusada de 14 delitos por su ex pareja Rigoberto, y quien se encuentra presa en Apizaco.

Su mamá, María Maricela, explicó que desde el 2019 presentó una denuncia por violencia y maltrato familiar de su entonces esposo, pero nadie la escuchó, nadie revisó los antecedentes de violencia, pero así se admitió -dijo- como prueba plena las del ex marido y que desde ese año no solo se encuentra encarcelada sino que le fueron retirados sus hijos y no los ha visto desde entonces.