Este día se reunirá con los titulares de SMyT y SSC para pedir su apoyo

Por Selene Sosa

El presidente de la Unión por la Defensa de los Transportistas del Estado de Tlaxcala (UDTET), Luis Texis Hernández, enfatizó que el robo a mano armada al transporte público continúa agudizándose en la entidad, principalmente en la Zona Sur.

El líder transportista refirió que el gremio no solamente se enfrenta a la crisis económica relacionada con la pandemia por Covid-19, sino también a la inseguridad que permea aún para el transporte, cada vez con mayor violencia.

En este sentido, Texis Hernández apuntó que recientemente se reunió con el titular de la Secretaría de Gobierno, Sergio González Hernández, para exponer los casos de inseguridad y, desde luego, solicitar su apoyo para solucionar dicho problema.

Como resultado de lo anterior, el presidente de la UDTET externó que este viernes se reunirá con los titulares de la Secretaría de Movilidad y Transporte (SMyT) y de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) para convenir su intervención en este tema.

Y es que los choferes de transporte no solamente se enfrentan a estos actos en los que los malhechores los despojan de sus pertenencias y de las propias unidades con lujo de violencia, sino que también realizan actos de secuestro exprés, sobre todo en los municipios de Nativitas, San Juan Huactzinco y Zacatelco.

En este orden de ideas, Luis Texis insistió en que los concesionarios no quitarán el dedo del renglón en su petición de incrementar dos pesos al costo de la parada mínima y 50 centavos por kilómetro adicional.

Lo anterior, reiteró, ya que la economía del gremio también se ha visto afectada por la crisis económica y el costo de los insumos, recursos materiales y combustible continúa al alza, por lo que, dijo, es preciso el aumento.

Finalmente, el líder transportista aprovechó la ocasión para hacer un llamado a quienes integran el Congreso del Estado de Tlaxcala, a legislar para reformar la Ley para el Transporte Público ya que la actual tiene 38 años, por lo que es “anacrónica y obsoleta”, concluyó.