Por Alfredo González 

Luego de que algunas dirigencias nacionales de los partidos asomaran la cabeza desde su madriguera para cacarear una eventual alianza entre el partido oficial MORENA y las rémoras del PVEM y el PT, los especuleros han alimentado el rumor de un mega bloque que aplaste a la oposición en 2021… ajá sí, claro que sí… todo parece indicar que se trata de un sueño guajiro maquinado de manera oportunista por el dirigente moreno, Alfonso Ramírez Cuellar.

Mientras la idea de su rueda de prensa-homilía, versaba sobre el hecho de que las bancadas de las tres fieras políticas armaban un bloque para impulsar y respaldada iniciativas presidenciales en San Lázaro, solo algunas de ellas, al efímero dirigente se le ocurrió la puntada de subir una alianza electoral en 2021 a la mesa… hecho que además de especulaciones no tiene mayor fondo hasta el momento.

Si bien es cierto que ya es casi un hecho que las alianzas entre los tres partidos pudieran cuajar en algunos estados, no fue más que mero Bluff electoral para ejercer presión a otros colores con posible alianza, es decir, tan sólo en el caso de Tlaxcala, los del partido de la estrella se han enfilado en afrontar solos la elección a la gubernatura con candidato propio, sonando fuertemente la entrega de la plaza a la alcaldesa capitalina, Anabell Ávalos bajo propuesta de Silvano Garay, o a un controversial y calzonudo Zaga, bajo patrocinio del ex alcalde Felipe Morales.

Por el lado del Tucán, la cuestión apunta diferente, pues si bien ya se ha cantado la alianza con el oficial oficialismo en algunos estados como Puebla, Zacatecas y demás, en el caso de Tlaxcala lleva varios años y sexenios de la mano del priismo local, fórmula 1 que de continuar podría ser una combinación ganadora en la carrera a la gubernatura.

Históricamente, su participación de la mano les ha acarreado buenos dividendos en los últimos comicios locales, sin embargo, el escenario político tlaxcalteca resulta demasiado complejo y cuenta una historia diferente en cada comicio, sin duda alguna, el estado y si política se cuecen aparte a todo el país… bendita tierra de toros bravos, y hombres mansos, decían por ahí.

Escenario aparte resulta en pensar que cada color vaya a la guerra con sus canicas, pues la pulverización del voto resulta en una constante que deja todo a las estructuras, al voto duro con el que cuentan y a un peso específico que podría cerrar la contienda a dos o tres opciones reales de triunfo… de poder a poder entre la vieja y nueva doctrina del priismo, con un Acción Nacional que se cuela a la contienda.

Números, y más números 

Las encuestas no mienten y los números son realmente fríos en todo sentido, pues si bien se habla y especula de aplanadoras, contendientes y demás, la elección a la gubernatura, a diferencia de alcaldías, diputaciones federales y locales, senadurías y demás, puede resumirse a la encarnizada lucha que se dará en la cima de las preferencias y donde, para sorpresa de nadie, se acortó la brecha entre la eterna ‘puntera y perdedora’ y los demás, que aún sin rostro ya le han comido el mandando seriamente.

Según los últimos números que dio a conocer el lunes la encuestadora Analítica Media, la diferencia entre los partidos MORENA y PRI se ha recortado a nueve puntos porcentuales, con un margen de indecisos del 40 por ciento, una cifra tendiente a clarificarse de cara a los  comicios y donde pudiera haber sorpresas para ambos bandos a unos meses de la elección.

Hay que recordar que el priismo es un electorado de closet, que tendiente al miedo por la crítica ‘chaira’ se reserva la opinión hasta la urna y constituye un capital importante, sind skate de lado la operación electoral que el mismo tricolor inventó desde hace décadas… por poner un dato en la mesa, durante 2016, a tres meses de la elección, el tricolor navegaba en el tercer sitio de la preferencia, a 14 puntos de doña Virreina, y pues, lo demás es historia.

Pareciera que MORENA se durmió en el sueño de los justos y dejó alcanzarse may fácilmente, pues si bien es cierto la designación de los candidatos es algo que aún está en vilo en todos lados, la tendencia de división al interior de los institutos no le favorece nunca a las izquierda y por el contrario, termina siendo lapidario, caso contrario a la disciplina y  capacidad de comer basura sin hacer gestos del priismo, algo que siempre ha sido aplaudido a través de los años.

Por otro lado, ha sido más que notorio que el mayor beneficiado con las visitas presidenciales no se encuentra si quiera en las filas morenas, pues el crecimiento, el plus de AMLO, ha sumado a la causa priista del ejecutivo local, quien incluso ha sido puesto como ejemplo nacional… pareciera que existiera por ahí algún arreglo macabro que podría definir todo y dejar la cuestión electoral como un mero trámite.

Por lo pronto, sólo queda esperar a que la tusa asome la cabeza y se clarifiquen los candidatos de cada bando para observar como recompone el tema o termina por irse a la deriva, lo que si es claro es que la distancia en las preferencias se acorta cada vez más al grado de que existe posibilidad de un empate técnico al comienzo de las campañas… un plato antojable para muchos que ya alistan estrategias para los comicios.

Así también, cabe la posibilidad de tiradores emergentes en la contienda, pues calladitos y a la sorda, actores políticos han comenzado a arreciar labores para incluirse en la batalla, ahí esta el caso de algunos alcaldes como Apizaco, Tlaxcala, Tequexquitla, Zacatelco, y demás… nunca hay que subestimar a nadie, pues el que respira aspira.

Vaya año 

Apenas y estamos a la mitad de este 2020 y ha pasado de todo a la humanidad, que cada mes encuentra una nueva potencial mortalidad, un año que ha dado más preocupación, terror y miedo que la propia 4 tortas… pues como dice la ley de Murphy, cuando algo sale mal, algo más puede salir peor… y este bendito México siempre podremos estar peor.

A la pandemia mortal de COVID-19,  la potencial tercera guerra mundial entre la OTAN y medio Oriente, se le sumó el terremoto de este martes, 7.5 grados Richter echaron a la calle en cuestión de segundos a familias que permanecían en claustro desde hace meses… a eso le sumamos la amenaza de tsunami en el océano Pacífico, el polvo del Sahara que está por visitar México, ciclones, huracanes y hasta una plaga de langostas que está escalando desde Argentina hacia toda América…¿algo más?.

Por si fuera poco, amenazas de brotes de sarampión, influenza, ébola en África y sur de Europa, dengue en las costas, en fin… dicen por ahí, sólo falta que nos masque el perro, todos los días se han vuelto en una lucha constante por no morir a la que le sumamos incendios, accidentes automovilísticos y la creciente inseguridad, llegar vivo a la noche se ha convertido en la meta más recurrente de los propósitos personales.

En todo ello, debemos reconocer la labor de paramédicos, bomberos, elementos de policía, rescatistas, y en el caso de Tlaxcala, a brigadas como las de Protección Civil, el Centro Regulador de Urgencias Medicas, voluntarios y demás,que cada día se rifan el pellejo por salvar vidas en este complejo escenario.

Es innegable que las acciones oportunas de las autoridades ha evitado la pérdida de miles de vidas, de controlar y eliminar riesgos potenciales a la población, pues si bien hoy hablamos de alrededor de 250 decesos y poco más de 2 mil casos positivos de COVID-19, la cifra sería mucho mayor de no ser por tantas acciones preventivas.

Hagamos conciencia y reconozcamos esa titánica labor de los héroes sin capa que nos han mantenido a salvo, el equipo mefico de hospitales, enfermeras y todos los trabajadores de la salud, todos aquellos involucrados en tantas y tantas tareas que han salvado vidas, además claro esta, de todos aquellos comunicadores que desde la primera línea, en medio de todo riesgo, se la juegan casi día por mantener informado a todo el mundo.

Mi reconocimiento y agradecimiento a todos aquellos que han cumplido con su trabajo a cabalidad e incluso, sobrados por mucho, a la altura de las circunstancias.