7 de enero - 2020
Por Edgardo Cabrera
Mientras en el PAN algunos se esfuerzan por hacer bien las cosas, otros de plano ven los cargos partidistas como su becerro de oro.
Lo anterior viene a colación porque el año pasado José Gilberto Temoltzin, fiel a su formación de empresario, planteó medidas de austeridad, entre ellas reducir los salarios de los altos mandos para “aliviar” las finanzas albiazules, ya que según él, la anterior dirigencia se las dejó maltrechas, amén de que se tuvieron que pagar una serie de finiquitos para despedir a los “carreonistas”.
“Pepe” el presidente se bajó 2 mil pesotes su sueldo, contradictoriamente “Migue” (Miguel Ángel Polvo), el flamante secretario, se incrementó en mil pesitos sus percepciones.
Mientras que la tesorera, Lilia Caritina, de plano se hizo como el tío Lolo y no se bajó, pero tampoco se incrementó el sueldo.
El resto de los funcionarios sí tuvieron ajustes que no superaron los 2 mil pesos mensuales.
Ahora, en otra de sus sesudas ideas, anunciaron que planean modificar sus estatutos para eliminar las trabas que existen para afiliarse a Acción Nacional.
Recordemos que históricamente ha sido más fácil que un camello entre por el ojo de una aguja, que un simple simpatizante panista ajeno a las cúpulas entre en el reino de los pitufines.
El problema para ellos es que dichos candados debieron ser eliminados desde aquellos tiempos cuando fueron gobierno y eran el partido de moda, como hoy Morena. En el caso estatal, el único gobernador que han tenido, Héctor Ortiz renunció al panismo, mientras que tantos y tantos representantes populares y ex alcaldes nunca los dejaron afiliarse o en su caso renunciaron.
Ahora sin ser gobierno y con voces timoratas desde la oposición estatal, difícilmente lograrán duplicar su padrón, como sueñan.
DE FONDO A «PROGRAMA» MOCHES
En el Congreso del estado queda claro que la austeridad no aplica, al menos en el fondo moches ahora denominado “programa de resarcimiento a las finanzas municipales para el estado de Tlaxcala”.
A diferencia del 2019, para este año prácticamente duplicaron el capital, son 486 millones 250 mil pesos los que se etiquetaron dentro del Presupuesto de Egresos.
Al igual que el año pasado, de la chistera, o de la manga, como gusten, se sacaron 372 obras y acciones en 58 de los 60 municipios de la entidad, los dos excluidos son Tequexquitla y Zitlaltepec, dado los conflictos que viven y sus desastrosas finanzas.
Y todo estaría bien si es que el programa fuera transparente, sin embargo nadie sabe cómo, porqué y bajo qué criterios se palomearon desde adoquinamientos, banquetas y techumbres, hasta la entrega de computadoras, calentadores solares y fertilizantes.
Evidentemente fueron otorgados bajo acuerdos políticos pactados, en algunos casos, con los alcaldes, en otros, con grupos internos del poder en los municipios, desde regidores, hasta líderes partidistas.
El asunto es que bajo este esquema, corren el riesgo de no lograr bajar todos los recursos como ocurrió en 2019 cuando tuvieron que devolver a las arcas estatales el recurso presupuestado.
“PREPARACIÓN” 2021
El alcalde de Xicohtzinco sorprendió ayer en su III informe, tan buena fue su convocatoria que pareció su predestape para la candidatura a la diputación local por el XIII distrito.
Y no es sorpresa, desde el año pasado se comenzó a manejar el nombre de José Isabel Badillo Jaramillo para la elección del 2021, incluso algunos estudios demoscópicos lo ubican como uno de los candidateables con mayores posibilidades de triunfo.
Quizá por ello al informe del alcalde perredista llegaron personajes no solo del Sol Azteca como Santiago Sesín, sino también panistas y morenos, entre ellos la senadora Minerva Hernández y la diputada federal Claudia Pérez.
Sabemos que varios partidos coquetean con el alcalde de ahí que a pregunta expresa de la prensa sobre sus expectativas para su cuarto año de funciones aseguró que: “este año será de preparación para el 2021”. A buen entendedor, pocas palabras.