Por Edgardo Cabrera

No reinventar el estado, como venía ocurriendo con cada cambio de sexenio, le está haciendo bien a Tlaxcala, y lo anterior viene a colación por la presentación del proyecto ampliación y modernización del Estadio Tlahuicole.

El equipo de futbol Coyotes, fundado por la administración de Mariano González Zarur, dio resultados.

Pese a los detractores, la realidad es que la franquicia resultó todo un fenómeno entre la población tlaxcalteca y ganó afición, en respuesta, los jugadores y empresarios de Providencia, así como el gobierno estatal y el Club Pachuca pagaron con lograr el ascenso a la antesala de la liga mayor del futbol profesional de México.

Pero cuando muchos apostan a la extinción de los Coyotes con el fin del sexenio, Marco Mena retomó el proyecto, le dio continuidad y se comprometió a ampliar la infraestructura del estadio Tlahuicole para cumplir con la norma de la FMF y que el equipo pueda jugar en la liga de Ascenso MX.

Quizá para algunos no resulta prioritaria la inversión, preferirían destinar ese recurso para otros rubros, sin embargo la administración estatal sopesó el costo-beneficio, y de entrada no darle continuidad al proyecto deportivo significaría tirar a la basura muchos millones de pesos que se le destinaron a los Coyotes en los últimos años; por otro lado, al mantener la franquicia calcularon la recuperación de la inversión en el corto plazo.

Nueva plaza comercial

Resulta que a la par de la ampliación del Tlahuicole, cruzando la calle, se construye una nueva plaza comercial, “Parque Vértice”, donde la iniciativa privada invierte 400 millones de pesos.

El consorcio, que es el mismo que construyó Galerías Tlaxcala, visualizó desde hace varios años la ampliación del estadio y la consolidación de la franquicia de futbol Coyotes, su plan de negocios consideró desde ese entonces que la afición que acudiría a los partidos serían potenciales clientes de los negocios que se asentarán en la plaza comercial.

Tan es así que ayer al presentar el proyecto de ampliación, se incluye un puente peatonal que comunicará ambos inmuebles ya que el estacionamiento de la plaza servirá para los aficionados que acudan a los partidos.

Hablamos que el estado invierte 180 millones de pesos para mejorar el Tlahuicole, que dicho sea de paso es propiedad del gobierno estatal, y a cambio recibe una primera inversión de 400 millones de pesos que crecerán exponencialmente conforme lleguen las franquicias y tiendas que albergará Vértice, amén de la derrama económica que dejarán los turistas deportivos que lleguen a Tlaxcala.

En suma, el primer saldo económico para el estado resulta positivo.

A colación

Por cierto que el gobernador Marco Mena anticipó que el espacio, que tendrá una capacidad para 15 mil espectadores, será multifuncional, por lo que podrá albergar no solo eventos deportivos, sino artísticos y culturales.

A la par sabemos que se instruirá construir un plan para elaborar una cartelera de actividades para propiciar mayor flujo de dinero.

Adicionalmente el mandatario aseguró que los recursos que se destinan al proyecto no afectará el plan de reconstrucción de escuelas y templos por la contingencia generada por los sismos.

Y es que seguramente los partidos de oposición al PRI utilizarán el tema para criticar al gobierno estatal y tratar de sacar raja electoral, aunque eso sería un mal cálculo ya que el tiro les podría salir por la culata debido a que los Coyotes gozan de simpatía entre la población, algo que no puede presumir la clase política.