Por Gerardo E. Orta Aguilar

En seguimiento a las declaraciones que la víspera emitieron vecinos y comerciantes de la zona centro de la capital del estado, integrantes de la organización El Corazón de Tlaxcala, exhortaron a la ciudadanía a denunciar los hechos delictivos de los que sean víctimas para evitar que los delitos queden impunes.

En rueda de prensa, Eduardo Hernández Muñoz, Norma Iris Pérez Olivas y Marco Antonio González Flores, integrantes del grupo organizado de vecinos y comerciantes, lamentaron que las autoridades municipales y estatales no estén otorgando la dimensión debida al fenómeno delictivo en la capital.

Tanto Norma Iris Pérez como Antonio González, denunciaron haber sido víctimas de delitos, la primera a casa habitación en la zona de Ocotlán y el segundo a una tienda de ropa en la que el monto de lo robado ascendió a 100 mil pesos.

Antonio González Flores detalló que ha tenido que cerrar su establecimiento debido a que fue robado hace unas semanas. Relató que ya se había preparado para la temporada alta de fin de año, requirió de un préstamo bancario de 30 mil pesos, pero el robo le obligó a cerrar su negocio.

Iris Pérez Olivas, destacó que las autoridades municipales y estatales han subestimado las denuncias que la ciudadanía ha realizado entorno al fenómeno delictivo, no obstante que sí se registran casos importantes de robos y asaltos.

Y es que la víspera, comerciantes y vecinos del centro denunciaron que la incidencia delictiva se ha incrementado en cierta medida en el centro de la ciudad, sin embargo, autoridades municipales descartaron esa versión, según relató un medio de comunicación local con base en declaraciones del director de seguridad capitalina Raymundo Fragoso Muñoz.

Eduardo Hernández Muñoz, quien a la vez es presidente de la Canaco en el municipio de Tlaxcala, admitió que al encuentro con los medios de comunicación se tenía prevista la presencia de hasta 18 personas que han admitido ser víctimas del fenómeno delictivo, sin embargo, no encontró el motivo por el cual se desistieron de ofrecer su testimonio de manera pública.