Por Edgardo Cabrera

Flaco favor le hacen al “arrojo del joven Xicohténcatl”, algunos que en la actualidad llevan su apellido.

Ahora sabemos que la autora intelectual del golpe de estado en el TSJE no solamente ha metido las manos en la CEDH, donde colocó a su marido como alto funcionario, sino que también intentó hacer lo mismo en el Patronato de la Feria de Tlaxcala.

Resulta que movió sus “palancas” para tratar de meter a su cuñado, quiso hacer valer su condición de magistrada para sorprender al colegiado que administra dicho ente, pero no pudo.

Y es que en el pasado, otro de sus cuñados también estaba incrustado en esa nómina, desde aquellos tiempos en que era una de las protegidas del marianismo.

Sin embargo, no hace mucho el hermano de su marido fue despedido por su conducta agresiva, ya que lo mismo insultaba que golpeaba a quien no lo solapara, sin importar que se tratara, incluso, de su jefe inmediato.

Por ello no es extraño que le dieran un portazo al enterarse que ahora intentara meter a otro cuñado para cubrir la vacante.

HABLANDO DE TRAICIONES

A colación de doña Rebe, ya nada sorprende, si fue capaz de darle la espalda al ex gobernador Mariano González (quien la puso en el TSJE) y de ponerle el dedo a su “amigo” Héctor Maldonado, el resto de los magistrados están en su misma ruta de las traiciones.

Es claro que el cuasi presidente Mario Jiménez es el instrumento de las ambiciones de Rebeca que está decidida a sucederlo en el cargo el próximo año.      

ADEMÁS DE COPIÓN, HOMOFÓBICO 

Lo que faltaba, no conforme con el acoso sexual y laboral del que han sido víctimas empleadas y ex trabajadoras por parte del titular de los derechos YA inhumanos, ahora nos cuenta la comunidad LGBTTTI que también fueron rehenes de los bajos instintos de este fulano.

Integrante de una de las organizaciones transgénero de Tlaxcala fue su presa tras acudir a pedir la intervención del organismo para atender varios asuntos, entre ellos demandas y gestiones, por parte de la comunidad con diferentes preferencias sexuales.

Sin tapujos, el Cid copión piropeó primero a la activista a la que le sugirió “ponerse vestiditos de forma cotidiana” y “perfumarse” para “evitar” las agresiones de los hombres.

Y no sólo eso, sino que al resto de sus compañeros los “invitó” a ponerse a realizar faenas comunitarias, entre ellas barrer las calles y pintar guarniciones, antes de pedir “protección” de la Comisión.

Por supuesto que ante la patética actitud del funcionario decidieron alejarse del organismo desde hace varios meses y seguir por cuenta propia el activismo, amén de recurrir mejor a la CNDH para promover quejas derivadas de actitudes homofóbicas como las expresadas por Cid.  

La indolencia a la comunidad LGBTTTI no es la única, recordemos también su apatía para atender a los grupos migrantes, incluso sus declaraciones tachándolos de delincuentes.

A lo anterior se suman otros tantos casos más de inconformidades por el mal trabajo que se realiza en la oficina que se supone debe defender los derechos humanos, entre ellos de abogadas y activistas como Félix Pozos, quien incluso solicitó la intervención del Congreso del estado.

Y para rematar, apenas este lunes inició una huelga de hambre la ex trabajadora, Gris Gracia Peña, a la que se niega a finiquitar a pesar de que la justicia laboral le dio la razón.