Supuesto policía poblano es linchado en Hueyotlipan hasta la muerte; lo acusaron de ladrón (video)
2 de diciembre - 2018

En Hueyotlipan fue castigado… y moribundo rescatado por la CES

Por Alfredo González

A punto de cumplirse la 1 y media de la mañana de este domingo, efectivos adscritos a la Comisión Estatal de Seguridad (CES) de Tlaxcala, lograron rescatar «moribundo» a un señalado de intento de robo de una camioneta con cebada, mismo que horas antes en una comunidad del municipio de Hueyotlipan fue retenido, atado y golpeado, con intenciones de darle un castigo ejemplar.

Y es que al caer la noche del sábado, Juan Manuel -N- un hombre de edad mediana, supuestamente originario y policía de Puebla (portaba placa), fue retenido por pobladores de San Diego Recova quienes lo atraparon cuando probablemente -desconociendo el terreno- intentaba huir y lo señalaban que junto a otros sujetos habían despojado de su camioneta a un vecino, al que abandonó maniatado.

Siendo trasladado alrededor de las 7 de la noche al centro de la comunidad, donde tras ser desnudado del torso fue atado a un poste para alumbrado público, para luego ser maltratado por los lugareños que exigían revelara de dónde era, a qué se dedicaba y si quería que se buscara a alguien para que fuera por él.

A lo que el sospechoso, semi inconsciente, con el rostro deforme y atado con un lazo de plástico amarillo a la parte baja del poste, donde ya había sido prendido fuego con intenciones de quemarlo, pedía ya no se le golpeara y se llamará a su licenciado, aceptando incluso que había intentado robar, todo lo anterior sin que interviniera la policía y mucho menos el presidente municipal de quien exigían su presencia.

Entonces fue que se hicieron presentes policías de investigación de la PGJE y personal de la Dirección de Gobernación estatal, los que al intentar entablar un diálogo y hasta negociar, recibieron encendidos reclamos por la marcada falta de seguridad, reproches por la ausencia de Mauro León Garfias el Alcalde y de paso por la no vecindad de los integrantes del cuerpo policiaco a quienes acusaron de posible colusión y no brindar de forma efectiva la seguridad a los ciudadanos.

Así transcurrió algún tiempo, hasta que los pobladores accedieron a que el señalado -custodiado por civiles-, fuera trasladado a bordo de una patrulla a la cabecera del municipio, donde al tubo blanco que integra el asta bandera que está frente a la alcaldía, fue nuevamente atado (a modo de horca) y castigado; hasta que el cuerpo semidesnudo que «tiritaba» por el frio de la temporada quedó inmóvil.

Ya para la 01:20 horas, tras valorar médicamente al individuo se permitió a los policías estatales que liberaran al indiciado, el que «moribundo» fue colocado en una patrulla y retirado del lugar, donde quedó la gente, que la noche y madrugada del domingo en exigencia de mayor seguridad hizo justicia y hasta castigó por «mano propia» a un sospechoso que portaba placa similar a la utilizan los policías y dejó de existir a causa de los golpes.