Por Fernando Tamayo

La próxima semana culmina el plazo por el cual la anterior legislatura separó del cargo al munícipe de Ixtenco Miguel Ángel Caballero Yonca, quien ya notificó al Congreso del Estado su intención de recobrar su investidura de Alcalde y retomar las funciones que son propias e inherentes al cargo.

Aunque los hechos que motivaron la suspensión de Caballero Yonca -en un dictamen sui generis y de suyo cuestionable- no han sido probados y la resolución definitiva sobre el juicio instaurado en su contra no se ha realizado, el Presidente Municipal de extracción pesista, tiene la firme convicción de asumir nuevamente el poder en Ixtenco, situación que a todas luces es un riesgo para la tranquilidad e inestabilidad política de dicha localidad ubicada en el Oriente del Estado.

Sin embargo y de acuerdo al propio dictamen elaborado por la anterior legislatura, el plazo está por cumplirse y de hecho y de derecho al munícipe le asiste la razón al pretender retomar sus funciones.

Desafortunadamente las declaraciones del Presidente de la Comisión de Puntos Constitucionales, Gobernación y Justicia del Congreso Local, Jesús Rolando Pérez Saavedra, lejos de fomentar la gobernabilidad y la paz sociales, dejaron entrever que los congresistas locales no solo están en contra del cumplimiento de la ley, sino que además, de manera irresponsable, advirtieron que en caso de que los ánimos se desborden será única y exclusivamente el alcalde quien deba asumir los costos.

Si bien es cierto los Diputados Locales son nuevos en su encomienda, estos deben conocer, las facultades y atribuciones que la ley les confiere. Bajo esta tesitura, el Congreso no puede excluir la responsabilidad de los actos que han ocurrido y que puedan presentarse en próximos días en el municipio de Ixtenco, buscando en todo momento ser interlocutores que permitan mantener la tranquilidad y paz sociales. Hoy no puede circunscribirse la labor legislativa a actos puramente públicos, pues la legislatura local a través de la Comisión de Asuntos Municipales debe atender debidamente el asunto y actuar en consecuencia.

La sociedad que votó por un cambio exige también un nuevo rumbo en el país, no debe dejarse atrás que esos mismos electores que les otorgaron el triunfo de igual manera reclaman una nueva forma de hacer política, se pronuncian por un cambio de actitud de los actores políticos, en este caso, de los señores legisladores, quienes actúan con la normalidad y desinterés del régimen que tanto criticaron.

Hoy el cambio debe comenzar por aquellos que tienen la enorme responsabilidad de demostrar que en México y en Tlaxcala si existen otro tipo de políticos y otra manera de hacer política en la forma y bajo las premisas que ellos mismos plantearon en campaña. Al tiempo.

Desde la barrera

Desde aquí el mayor de mis reconocimientos a un periodista integro, cabal y siempre consiente de la enorme responsabilidad de su labor de informar. Descanse en paz Juan Ramón Nava referente obligado e icono del periodismo de altura en Tlaxcala. A sus familiares, mis condolencias y que encuentren pronta resignación.

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