Por Edgardo Cabrera

La excursión familiar al Vaticano pasó de ser viaje turístico a relámpago, la mandamás debió suspender los planes vacacionales para regresar “como de rayo” a la Ciudad de México ante el llamado de la corcholata mayor para la ceremonia del garrotazo de mando, que en los tiempos de la mafia del pasado se denominaba dedazo.

Lo de menos fue conseguir vuelo para México, aunque asegura lo contrario, el gasto se cubrió con el erario que alcanza para todos sus lujos y excentricidades, menos para cumplir con su obligación de ley y entregar de forma gratuita uniformes a los estudiantes.

Fue así que llegó presurosa y, hábil como la conocemos, entre sonrisitas, empujones y codazos se coló hasta adelante para la foto, lanzarle porras y vivas amnésicas, recordemos que a Claudia le dio la espalda y prefirió apoyar al ex secretario de Gobernación.   

En los tiempos que Adán Augusto se promocionaba como #AhoraEs la mandamás no escatimó en desviarle recursos para su campaña, misma que coordinó Raymundo, su cuñado, proliferaron bardas y anuncios espectaculares, colocaron cientos de calcomanías en el transporte público lo que, por cierto, está prohibido por norma, amén del descarado acarreo en sus visitas. 

DAMNIFICADOS

Antes de separarse del cargo de secretario de Gobernación, le organizó la inauguración del C5i, pese a que estaba a medio terminar y sin equipar; para que se viera el apoyo, puso a su servicio la Secretaría de Gobierno, donde Sergio se frotaba las manos para la senaduría. Con la pena, pasaron del #AhoraEs al #YaNoFue de ahí la urgencia de la mandamás de “abandonar” al Papa e incumplir la penitencia, para regresar a lo suyo: el interés que, para eso son grandes los pies. 

Otros más que se quemaron fueron alcaldes como el de Contla, Eddy Roldán, o el de Santa Cruz Tlaxcala, David Martínez, cuyas fotografías en los actos proselitistas evidenciaron, además, que incumplieron la orden de no intervenir en el proceso por tener un cargo público.

EN ESO DE LAS MENTIRAS

Con la novedad que no solo el titular de Protección Civil alteró el símbolo internacional de “la estrella de la vida” para poner en su casco la silueta de una mujer en un tubo, por cortesía de la Secretaría de Seguridad Ciudadana y de Maximino, el Comisionado Ejecutivo del Sistema Estatal de Seguridad, descubrimos que otro elemento también hizo lo mismo. 

En las imágenes colocadas en las redes sociales donde se difunde información oficial de ambas dependencias, se presume como “héroe” a un sujeto auto apodado “flama”, quien según llegó a atender el devastador incendio en una fábrica de Yauhquemehcan, curioso, se le aprecia limpio, sin tizne en uniforme, manos y rostro, es claro, solo posó para la foto al final del incidente.

Pero lo verdaderamente lamentable, es que al comisionado Maximino no le importó el casco con la silueta de la bailarina en tubo, en un estado estigmatizado por la trata de mujeres y, por el contrario, lo consideró el “héroe de esta película papá”, sí, como aquel escándalo del ex gober poblano Mario Marín, apresado por torturar a una periodista.