Por Edgardo Cabrera

Los de la Sección 31 del SNTE aseguran que darán a los tlaxcaltecas catedra de “civismo y civilidad” en las elecciones de este jueves mediante las cuales renovarán su dirigencia, vencida desde hace 18 meses.

En lo particular tengo mis dudas, no vaya a ser que reprueben los maestros cuando se abra el proceso de votación y tanto la planilla que comanda Arturo Morales, como la de su adversario, Cutberto Chávez, pasen de los insultos y agresiones en redes sociales, a la violencia física y al desorden.

Los ánimos están caldeados en la base trabajadora, pero también en la cúpula, tan es así que comenzó a circular en los grupos de WhatsApp de los profesores una supuesta amenaza de la gobernadora Lorena Cuéllar, vía el secretario de educación pública, Homero Meneses, donde amagan con separar del cargo a los jefes de departamento de la USET que interfieran en el proceso interno.  

El amago cae como “anillo al dedo” y lo difunden los de Cutberto Chávez, porque hay señalamientos que algunos funcionarios como el director general del subsistema CECyTE, José Luis Flores Aguilar; la ex diputada Luz Guadalupe Mata y titular de los Centros de Atención Infantil; así como Jesús Omar López Conde, quien se encuentra en extensión territorial de la USET, estarían operando abiertamente a favor de Arturo Morales.

“Por instrucciones de la gobernadora, les comento que está estrictamente prohibido interferir en el proceso electivo de la Sección 31 de SNTE, desde su figura pues son autoridades educativas y por tanto patronales, la persona que sea denunciada y evidenciada en esta situación será separada del cargo… Saludos y abrazo fuerte”, se lee en el mensaje mostrado por algunos mentores.

Aunque se le preguntó, el secretario no confirmó la veracidad del mensaje, ‘lo que sí, proporcionó copia de un oficio firmado por él y enviado al aún dirigente Demetrio Rivas, el 18 de octubre, mediante el que expresa el compromiso de la actual administración por ser respetuosos de sus elecciones y aseguran no tener preferencia por ninguna de las planillas. 

TENSA CALMA

En Xicohtzinco se vive una tensa calma, después de los hechos violentos de hace un par semana y de los cuales, por cierto, la PGJEtambién ha metido en la congeladora las indagatorias y órdenes de aprehensión derivadas de un intento de homicidio, daño en propiedad privada, vandalismo y robo.

Parece que el secretario de Gobierno, Sergio González era el problema, en su intento por complacer a su ex correligionario y ex auditor Crispín Corona, no actuó con imparcialidad, por el contrario, cargó los dados a favor de los inconformes, aunque no les asiste la razón legal al carecer de elementos probatorios de sus acusaciones, pero también al mostrar ambición de puestos para el grupo.

El caso llegó al Congreso local, el presidente de la Junta de Coordinación y Concertación Política, el morenista Rubén Terán entró al quite y logró calmar las aguas, y es que el problema tendría que empezar a resolverse por lo simple: escuchar a todas las partes para empezar a construir un acuerdo, antes de abrir la boca o lanzar amenazas e injurias.

El diputado morenista no es un improvisado en eso de resolver problemas, en el pasado se encargó de las broncas de gobernabilidad en el sexenio de Mariano González, y su astucia le permitió al entonces gobernador salir de un bache de conflictos sociales que enfrentó al arranque de su gobierno, tal y como ahora los vive Lorena Cuéllar.

Evidentemente, mientras el ex panista Sergio González ha contribuido a los conflictos, en lugar de agua les ha rociado gasolina, en el Congreso parece que sí le quieren ayudar a la gobernadora, ahora solo falta que se dejen y que no meta de nuevo sus manos quien ya demostró en mes y medio que le quedó muy grande el puesto.

En la carrera para el senado, es claro que mientras unos andan construyendo castillos en el aire, otros no se distraen con futuros inciertos, saben que podrían llegar a la meta tejiendo alianzas.