Eymard Grande no paga, lo retienen sus trabajadores
10 de agosto - 2021

Entre reclamos por adeudos de pagos de prestaciones, edil tuvo que ser rescatado por un grupo especial de presuntos policías municipales

Por Alfredo González

Este martes, los conflictos para el ayuntamiento de Panotla siguen al alza, luego de que empleados de la administración municipal que se encuentran basificados, reclamaran al presidente municipal Eymard Grande varios presuntos adeudos de pago a prestaciones y percepciones, situación que derivó en el que edil fuera retenido en su oficina.

Los hechos se registraron al interior del inmueble de la presidencia, donde las de una decena de trabajadores sindicalizados se apersonaron en el despacho del alcalde, donde entre reclamos y gritos le recriminaron el aparente incumplimiento del pago de sus percepciones, situación que dijeron, el edil se habría negado a reconocer para heredar el conflicto a la próxima administración.

Situación por la cual, los trabajadores optaron por evitar que el munícipe pudiera abandonar la oficina, y pese a la presencia de personal de la secretaría del ayuntamiento que trataba de mediar la situación, los aminos comenzaron a encenderse entre gritos y reclamos, ante la negativa de Eymard Grande por cubrir los adeudos.

Fue después de varios minutos que, un grupo de presuntos policías municipales que pertenecerían a un grupo especial de reacción, que el alcalde pudo ser sustraído del inmueble en medio de empellones, lo que al momento mantiene a la administración municipal en suspensión debido a presuntos amagues de paros de labores y manifestaciones.

Incluso, los quejosos señalaron que existen varias anomalías en el ayuntamiento que está a punto de concluir su periodo, incluyendo aparentes ilegalidades que han representado posible desvío de recursos, señalando que la existencia del grupo de reacción policial que rescató al presidente se trataría de empleados ajenos a la dirección de seguridad municipal que según su dicho, portan armas de fuego sin ser policías debidamente acreditados, lo que implicaría que el edil utiliza recursos públicos para obtener un cuerpo de seguridad personal.