10 de febrero - 2020
Por Edgardo Cabrera
Malas noticias recibirá esta semana el alcalde de Huamantla, Jorge Sánchez Jasso, el juicio político que se le sigue en el Congreso local da cuenta que sí hay elementos para actuar en su contra.
Y aunque seguramente el edil utilizará el trillado recurso de que es un “asunto político”, en los hechos ni su partido, el PRI, ha querido meter las manos para defenderlo de las graves acusaciones que enfrenta.
De ahí que no resulte extraño que apenas el pasado 27 de enero el dirigente estatal del tricolor, Noé Rodríguez Roldán declarara que su partido no será cómplice de priístas irresponsables. Todo parece indicar que ya sabía el sentido del informe contra su correligionario.
Aunque no es el único caso, quien también se encuentra en la mira es el edil priísta de Tequexquitla, Oscar Vélez, personaje queestá coludido con el de Huamantla en otros graves asuntos más de los cuales después detallaremos.
Por lo pronto, en el caso del huamantleco una de las primeras medidas que podría enfrentar es la suspensión de sus funciones en tanto las autoridades jurisdiccionales resuelven las denuncias penales que ya existen en su contra.
Aunque hay otras voces que hablan de removerlo ipso facto para que Tlaxcala se convierta en ejemplo nacional de un congreso local con mayoría morenista donde se aplique tal medida contra autoridades presuntamente corruptas.
Todo ello podría concretarse en este mismo mes del amor y la amistad.
EL INFORME
El informe entregado al cierre de la semana pasada a la Junta de Coordinación y Concertación Política por parte de la Comisión Especial da cuenta de que sí hay elementos para actuar en su contra y sancionarlo hasta con la remoción del cargo.
En dicha comisión de legisladores, donde por cierto se encuentra la priísta Zonia Montiel, concluyó que “existen en actuaciones, datos suficientes para presumir su responsabilidad del ilícito que se le reprocha”, para ser claros, Sánchez Jasso no pudo desvanecer las acusaciones en su contra.
Es más, en ese mismo informe se precisa que existe la presunción de que el señalado incurrió en actos delictuosos en su carácter de presidente municipal de Huamantla, y que durante su comparecencia no pudo desvirtuar al no aportar prueba alguna en su defensa, simplemente les fue a narrar un cuento chino.
Recordar que el procedimiento contra esta autoridad la promovieron un grupo de ciudadanos, quienes lo acusan de malversar recursos públicos en el ejercicio fiscal 2017.
El asunto no es menor, de acuerdo con lo que se indaga y que derivó incluso en una denuncia penal, Sánchez Jasso es señalado de desviar los fondos presupuestados para la compra de luminarias.
Según la propia Comisión Especial que analizó el Juicio Político y que encabeza el petista Víctor Castro, la administración aumentó el costo al doble, ya que el gasto lo declaró en 45 millones de pesos, cuando en realidad –dicen- la inversión se estima de entre 15 y 20 millones de pesos.
Por cierto que de concretarse la remoción del alcalde, la actual legislatura sumaría dos asuntos en los que aplicó dicha medida, el primero fue contra los ahora ex consejeros del Instituto de Acceso a la Información Pública, quienes terminaron por salir por la puerta de atrás tras las disputas internas del poder.
Sin embargo, el caso de Huamantla cobra notable relevancia ya que se trata de un asunto de presuntos actos de corrupción.