25 de octubre - 2024
Por Edgardo Cabrera
Sin apenas cumplir dos meses en el cargo, algunas autoridades municipales ya acumulan una serie de tropiezos, yerros, traiciones y excesos que en algunos casos provocó que regidores y población quieran destronarlos como en el caso de Mazatecochco.
En ese lugar gobierna el Verde Ecologista y el presidente Emilio González es acusado de malos tratos y autoritarismo, dicen los regidores que el cabildo es ignorado y gobierna como si se tratara de una corte virreinal donde solo él manda, los demás son comparsa. Toda esta semana han amagado con tomar la alcaldía en protesta contra su edil, ¿y la Segob?, durmiendo.
Lo mismo ocurre en Contla, ya lo habíamos dicho, luego de aquel nombramiento del ex edil y hermano de la alcaldesa como presidente municipal interino, y así está registrado en una grabación que trataron de desestimar con un soso comunicado de prensa que solo provocó mayor indignación, porque en los hechos, es evidente quién mueve los hilos, bueno, han corrido a directivos recién nombrados para poner a los de antes que le hacen caso al de antes.
En otros casos han dejado evidencia y documentado deficiencias en los procesos de entrega recepción ya que les heredaron un chorro de deudas y, en el mejor de los casos, con el presupuesto comprometido en el último cuatrimestre del año, y en este rubro es de destacar los casos de la capital del estado y Tlaltelulco donde salieron con documentos en manos y pruebas gráficas de la situación de los bienes muebles e inmuebles.
En el municipio de Tlaxcala el quebranto documentado asciende a 123 millones de pesos, sumado a laudos y vehículos chatarra o desaparecidos, entre ellos, camiones recolectores de basura, motopatrullas, patrullas y grúas, así lo evidenció el alcalde Alfonso Sánchez.
En Tlaltelulco la cosa no es mejor, la alcaldesa Rocío Meléndez documentó un hoyo financiero de 40 millones de pesos, su antecesor, el ecologista Antonio Pluma le dejó la presidencia hasta con el piso saqueado, ¡sí!, desprendieron hasta la loseta y, sostenido con alambritos, las partes de vehículos, allá de plano no les dejaron ninguno en funcionamiento.
Hay obras malhechas y otras inexistentes, ¡pero pagadas!, hubo un robo de medio millar de bienes que estaban almacenados en una bodega cerrada, también con alambre (les encantaban los alambres), lo increíble, es que esa sustracción la denunciaron un año después, ya que habían perdido la elección con la hermana del ex alcalde que intentaba sucederlo, gualito que en Contla.
Y hay otros lugares como Apizaco, donde algunos funcionarios entrantes se sintieron los reyes de la colina, de plano se daban el lujo de acallar no solo a la prensa, sino al mismo alcalde, esas actitudes le costaron el puesto a la que cobraba como vocera, por ejemplo.
El resto, sobre todo los que han guardado silencio respecto a sus procesos de entrega-recepción, que al rato no se llamen a sorpresas por encubrir a sus antecesores, por cierto, de las cuentas públicas del primer semestre, veremos cuántos terminan en responsabilidad penal, no solo administrativa, francamente, dudo que alguno ya pasó el proceso electoral.