Se deslindó de la liberación de los señalados y se colocó como héroe por su “exitoso” protocolo

Por Selene Sosa

El titular de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC), Ramón Celaya Gamboa insistió en que el actuar de los elementos de dicha dependencia local para salvaguardar la integridad de los señalados como delincuentes a bordo de una unidad de transporte público el pasado fin de semana en Zacatelco, fue el correcto.

El funcionario originario de Guerrero arremetió contra la población enardecida que había retenido la unidad en cuestión con la intención de hacer justicia por mano propia, como resultado de un hartazgo social ante la falta de esta por la vía legal.

En entrevista colectiva Celaya Gamboa calificó de borrachos delincuentes a las decenas de personas que se concentraron en la cabecera municipal de Zacatelco con la intención de “quemar” a un grupo de personas, entre ellas menores de edad.

Por lo que el secretario de seguridad enfatizó que su actuar fue el idóneo ya que, explicó, la SSC entró como mediadora del conflicto entre dos grupos, “El primero eran las supuestas víctimas del delito… con una actitud intransigente… pero cuando entramos a la fase de negociación, fueron exitosas… porque decidieron empezar a flexibilizar”.

No obstante, dijo, el segundo grupo con el que la SSC tenía que lidiar, “Fue un grupo de hombres violentos en estado de ebriedad, incluso con un fuerte olor a marihuana que lanzaron la amenaza directa –los vamos a quemar-, es decir, no había manera de negociar”.

De ahí, Ramón Celaya justificó el actuar de los uniformados estatales, puesto que, agregó, la integridad de cuatro menores de edad estaba comprometida en dicho conflicto, “Ubicamos el pulso exacto antes de que se saliera de control, había que terminarlo en el momento exacto”.

Así, el responsable de la SSC justificó que los disparos al aire y el uso de gas lacrimógeno fueran las medidas pertinentes para “calmar” a la población enardecida y poder salvaguardar a los supuestos delincuentes que, más tarde, fueron liberados por anomalías en la cadena de custodia.

Celaya Gamboa externó que el Protocolo de Actuación Policial no fue cumplido por los efectivos de Zacatelco, dado que ni siquiera el director de seguridad municipal hizo acto de presencia en el lugar de los hechos ni en la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), toda vez que, adelantó, dicho protocolo será perfeccionado.

“Ante este grupo de violentos tenía que frenarse de manera contundente, tengo dos policías descalabrados y golpeados con piedras, a uno le dieron un tubazo en la cara estos borrachos, violentos, me dañaron una patrulla y esta no era gente que tenía que ver con el hecho, llegaron como siempre en una actitud de morbo, de violencia y en un completo estado de ebriedad que ni siquiera podían articular una frase coherente”.