Por José Luis Ahuactzin

En un hecho consumado y con retroactividad a la sesión extraordinaria del 30 de mayo, este viernes la Comisión Permanente del Congreso local aprobó el reconocimiento de la validez de la votación realizada en la sesión de ese día, por lo que Jackeline Ordóñez Brasdefer se convirtió en la presidenta de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH).

Incluso, de forma urgente le fue tomada la protesta de ley a Ordóñez Brasdefer para asumir funciones de presidenta de la CEDH desde este 18 y hasta el 11 de junio de 2025.

No obstante a que la Comisión Permanente está integrada por 4 diputados, todos votaron para avalar dicha retroactividad para validar la aprobación del dictamen del pasado 30 de mayo, fecha en la que se presentó al Pleno la propuesta para designar a la próxima presidenta de la CEDH.

Quienes avalaron dicha retroactividad fueron Luz Vera Díaz, Mayra Vázquez Velázquez, Aitzury Fernanda Sandoval Vega y José María Méndez Salgado, los últimos dos diputados el viernes pasado se negaron a aprobar dicho dictamen.

Entre los argumentos que vertieron los diputados, es que la entonces presidenta de la Mesa Directiva Luz Guadalupe Mata Lara interpretó la ley de forma equivoca y según ellos, bajo su propio criterio de la votación; es decir, que requería 17 votos que conforman la mayoría calificada de los 25 diputados locales que integran la legislatura.

Pero 19 días después, la Junta de Coordinación y Concertación Política (JCCP) y la Comisión de Puntos Constitucionales, determinaron revocar y corregir ese dictamen del 30 de mayo, pues la mayoría calificada es de 12 diputados de 18 que integraron la Legislatura, pues 7 de ellos presentaron licencia para separarse del cargo.

Luego entonces, al ser 18 diputados quienes conformaban la legislatura la mayoría calificada se debió tomar de esa cifra, que son 12 -según los diputados-, y fueron justo los que votaron a favor de Ordóñez Brasdefer en la sesión extraordinaria pasada del 30 de mayo.