Por Edgardo Cabrera

Tal y como lo habíamos anticipado en este espacio, el ejecutivo realizó un análisis concienzudo de las reformas a la ley de Comunicaciones y Transportes que los diputados aprobaron y mediante las cuales reconocen la legal operación de las plataformas de movilidad.

Tras revisar los pros y los contras, el gobernador Marco Mena ordenó la publicación de las modificaciones a la ley, con lo que se confirma la decisión tomada por los diputados, esa de que tanto particulares como concesionarios del servicio público puedan operar estos sistemas tecnológicos.

El asunto es que el veto al decreto significa ir en contra de las propias disposiciones que su gobierno, por medio de Secte, aplica desde el año pasado mediante dos acuerdos emitidos para registrar y autorizar permisos para la operación de las plataformas.

Pero también hablamos que tanto el ejecutivo como el legislativo desde la construcción y aprobación de la ley de ingresos reconoció la captación de una importante suma de recursos económicos por concepto de derechos cobrados a las empresas que ya operan el servicio de traslado de personas de forma ejecutiva y vía una plataforma digital, llámese Pronto o Uber.  

A lo anterior se le agrega otro “pro”, quizá el de mayor peso, fueron los diputados, más no el Ejecutivo el que planteó y legisló este tema, de ahí que si alguien está inconforme debe canalizar sus reclamos a la sede del Palacio Legislativo, porque también los recursos legales que puedan iniciar aquellos que se sientan afectados deberán ir en el sentido de los legislado.

ENTRAMPADOS

Fracasó el nombramiento del representante del legislativo ante el Consejo de la Judicatura, el bloque de la 4T llegó dividido y no alcanzaron los votos para designar al ex consejero del ITE, Raymundo Amador García.

La propuesta habría surgido desde el propio Morena-PT, teniendo como principales impulsores la resentida Ana Bertha Mastranzo Corona, quien aún no digiere que fue removida de la coordinación de la bancada mayoritaria y el presidente de la Mesa Directiva, el panista Milton López, que se dejó manipular -una vez más-.

A ella se sumaron el gris Ramiro Vivanco Chedraui, la señalada por pedir moches, Mayra Vázquez Velázquez, y Lourdes Montiel Cerón, quien ni fu, ni fa. También detrás estuvieron los petista Víctor Castro y Michel Brito, así como los del PEST José Luis Garrido Cruz y Luz Vera Díaz, y la chiquillada.

Pero solamente lograron en el Pleno 13 votos a favor, con lo que fracasó su intento de madrugar con su propuesta.

En contra estuvieron 9, entre ellos los morenistas José María Méndez, María del Rayo y Víctor Báez, quienes también rechazaron la propuesta fue la petista Irma Garay. En total se necesitaban 17 dedos arriba.

Quemado el cartucho, ahora tendrán que elegir de entre Pablo Cadena Romero, personaje que trae el impulso del diputado morenista Víctor Báez, y Alberto Herrera Vázquez, personaje ligado con el presidente del TSJE, Fernando Bernal, o de plano subir una nueva terna con mujeres.

MÁS QUE MIL PALABRAS

Con todo y que presumen «estrategia», la realidad es que la chiquillada encabezada por Milton fueron embaucados por los morenistas del grupo de resentidos; les vendieron la idea de impulsar a Raymundo como «su» candidato pero en realidad le hicieron el juego a la mano que mueve los hilos de algunos de estos autómatas.