Moreno Valle está obsesionado con Tlaxcala, por más que lo intenta no puede ganar, ahora vino a promoverse -con un club de perdedores- como aspirante presidencial. Varios panistas nos comentan que el edil de Tlaltelulco habría desviado recursos con fines políticos. Y las comunas recibieron del Fondo de Estabilización del Gobierno, 21.7 mdp para pagar adeudos

Por Edgardo Cabrera

El gobernador poblano está obsesionado con Tlaxcala, por más que lo intenta nada más no puede ganar, en todas las competencias en las que se entromete pierde, ya sea frente a su correligionaria Adriana Dávila o su homólogo Mariano González Zarur.

Su injerencia sólo ha impactado en un puñado de panistas que, hay que decirlo, simplemente no pesan a la hora de los resultados electorales, venden espejitos como si se tratará de oro sólido.

En el pasado proceso electoral Rafael Moreno Valle le dio la espalda al PAN de Tlaxcala, apoyó a la perredista Lorena Cuéllar con tal de vengarse de Dávila Fernández a quien no le perdona que le arrebatara los triunfos en aquellas disputas por la dirigencias estatal y nacional donde el poblano traía sus alfiles.

Aunque se dé baños de pureza y llame a la “unidad” para “no repetir los errores del pasado”, lo cierto es que su perversidad abonó para cavar la tumba de su partido en Tlaxcala.

Ahora en su loca carrera por ser candidato presidencial llama la atención que venga a la entidad, una vez más, a promover su imagen con un discurso más falso que los billetes de 50 centavos, por cierto, con el mismo club de liderazgos perdedores: Miguel Ángel Polvo Rea, derrotado en 2015 en las elecciones federales; Aurora Aguilar, quien nunca ha competido en las urnas y sus imposiciones en candidaturas han tenido el mismo cruel desenlace del fracaso; Lilia Olvera Coronel, perdedora en el III distrito federal en los comicios de hace un año.

Y mientras los ilusos le hacen caravanas a Moreno Valle en Tlaxcala y presumen que “transformó” el rostro de la capital de ese estado, en los hechos Puebla se encuentra rezagado en indicadores como la generación de empleo, combate a la pobreza e inseguridad; la deuda de aquella entidad se encuentra por la nubes (algo así como 70 mil millones de pesos) con lo que su mayor herencia a su sucesor y a la población será precisamente pagar caprichos como la mega rueda de la fortuna o su pretensión de ser presidente de la República. Aquí las cifras (http://www.sdpnoticias.com/nacional/2016/05/23/rafael-moreno-valle-corrupcion-nepotismo-y-opacidad)

Como datos comparados y aunque hay muchos malinchistas: en Tlaxcala existe 0 deuda, este año la economía local es de las 9 más dinámicas según cifras del Inegi, SE y Coneval; se redujo la pobreza extrema y el empleo presenta el mayor crecimiento de los últimos 3 sexenios, solamente en comparación con el gobierno panista que le antecedió el alza es de 27.7 por ciento.

Frankenstein

Por cierto que varios panistas nos comentan que el alcalde de Tlaltelulco, Miguel Ángel Polvo Rea habría desviado recursos públicos para realizar invitaciones al desayuno que se realizó este domingo con su ex patrón.

Nos dicen que personal del ayuntamiento se comunicó –desde líneas que se pagan con el presupuesto del erario- con varios azules para convocarlos a la reunión.

La idolatría de Polvo Rea a Moreno Valle no es un tema nuevo, así fue toda su gestión como alcalde, pero lo que en vedad llama la atención es que el gobernador poblano aún le crea a su pupilo de quien hizo un verdadero Frankenstein perdedor.

Recordemos, con todo y que metió las manos al fuego por él, no pudo ganar las elecciones federales de 2015 frente a una desconocida priísta. Tampoco olvidemos que su “operación” fue tan deficiente en las competencias por las dirigencias estatal y nacional de su partido que los llevó a la derrota. Y para rematar, fue incapaz de mantener al PAN gobernando Tlaltelulco.

Rescate

En Tlaxcala, el buen manejo de las finanzas públicas durante el gobierno de Mariano González Zarur ha permitido que los Municipios cuenten con recursos adicionales en beneficio de la ciudadanía.

Durante el mes de julio, las comunas recibieron del Fondo de Estabilización del Gobierno, 21.7 millones de pesos (mdp) para pagar adeudos, lo cual les permitió avanzar en el saneamiento de sus finanzas, de cara al cierre de administración municipal.

De esa manera, los ayuntamientos pagaron adeudos pendientes por 2 mdp a CFE; 5 mdp de Impuesto Sobre Nóminas; 4 mdp de impuestos al SAT; 1.1 mdp a Conagua; y 7 mdp para otros conceptos.

La austeridad y la disciplina presupuestaria sostenida tienen buenos resultados, como lo muestran las cifras de 2011 a la fecha.

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