Además de los alcaldes de Contla y Apizaco, existieron otros 3 albiazules que de último momento le dieron la espalda a su partido para apoyar al PRI. Conforme avanza el proceso poselectoral el TET pierde credibilidad, ahora Morales Alanís se enfrenta a un claro conflicto de intereses dentro de un ente que sólo sirvió para engordar el aparato burocrático

Por Edgardo Cabrera

Nos cuentan que además de los alcaldes de Contla y Apizaco, en el pasado proceso electoral existieron otros 3 albiazules que de último momento le dieron la espalda a su partido para apoyar al PRI.

Tómelo con sus reservas, pero existen hechos (como el resultado en sus jurisdicciones) que evidencian que el de Calpulalpan, Vicente Hernández; el de Teolocholco, Pedro Tecuapacho; y el de Tlaltelulco, Miguel Ángel Polvo; terminaron del lado tricolor.

Quien más sorprende es este último ya que sirve a los intereses del poblano Rafael Moreno Valle pero, al parecer, se molestó porque nunca fue integrado a la burbuja del DDT (dizque dream team) de la ex candidata del PRD.

En la misma circunstancia se encuentran algunos diputados panistas como el de Huamantla, Humberto Macías, quien le cobró así la factura al adrianismo por no dejarlo pasar como candidato a la alcaldía.

Deslegitimado

Conforme avanza el proceso poselectoral el TET pierde credibilidad, parece que los más de 80 medios de impugnación que deben pasar por sus manos saldrán al vapor o con la sospecha de los famosos “impulsos” procesales.

La semana pasada salió a relucir que de manera sorprendente los asuntos más delicados promovidos por el PAN habían quedado en manos de la ponencia del magistrado Luis Manuel Muñoz Cuautle, personaje allegado a Acción Nacional y a la senadora Adriana Dávila.

Apenas ayer nos enteramos que será el presidente del Tribunal Electoral de Tlaxcala, Hugo Morales Alanís quien desahogue la impugnación promovida por la ex candidata del PRD a la gubernatura quien, inconforme por su derrota, demanda anular la elección del pasado 5 de junio.

El asunto es que Morales Alanís tiene claras y abiertas preferencias por el Sol Azteca, recordemos que antes de ser designado en el TET fue secretario técnico del diputado perredista Salvador Méndez Acametitla y, años atrás, llegó al cargo de director jurídico del Congreso local por el PRD, sin olvidar que fue magistrado en el sexenio de Alfonso Sánchez Anaya como un pago de factura a dicho partido.

Lo anterior pone en entredicho su imparcialidad en el análisis y resolución que tendrá sobre la impugnación promovida y que, según nos dicen, tendrá que resolverse antes del día 15 de este mes.

Por tanto, estamos ante un evidente conflicto de intereses.

Así nació…

A colación del TET, lo cierto es que dicha instancia sólo sirvió para engordar el aparato burocrático, repartir posiciones entre los senadores y retardar la impartición de justicia.

Recordemos que la integración del Tribunal Electoral de Tlaxcala se derivó del cabildeo entre el PRD, PAN y PRI, cada uno impuso a sus alfiles.

El Sol Azteca se inclinó por Hugo Morales Alanís, el PRI por José Lumbreras y el albiazul por Luis Manuel Muñoz Cuautle. Ahora entenderán sus intereses y comportamiento en el proceso poselectoral.

Pero lo peor del caso es que al final del día sus decisiones no serán definitivas, los inconformes deberán agotar otras 2 instancias antes de que existe una sentencia final ¿entonces cuál fue la razón de contar con un nuevo tribunal local?

Después del TET seguirá la Sala Regional del TEPJF y por último estará la Sala Superior, es decir, por ahí de septiembre u octubre estarán desahogándose la totalidad de los recursos.

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