Por Edgardo Cabrera

No hay vuelta de hoja, el lunes nos enfilamos a nivel nacional a la Fase 3 de propagación del coronavirus Covid-19, de ahí que el gobierno federal y sus voceros en materia de salud declararan la emergencia sanitaria y anunciaran 7 nuevas medidas para contener la propagación.

Sin embargo, una vez más Tlaxcala se adelantó a las acciones, desde el domingo el gobernador Marco Mena anunció el cierre de gobierno, únicamente operan desde este lunes oficinas indispensables y cruciales como Salud, Seguridad, Protección Civil, Comunicación Social y Finanzas.

El subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell, señaló que como primera medida se extiende hasta el 30 de abril la suspensión de actividades no esenciales en sectores públicos, privados y social (antes estaba al 20 de abril), con ello, el futuro de las actividades escolares presenciales aún es incierto ante el anuncio del regreso escalonado.

A las medidas federales se agregan, por ejemplo, no realizar reuniones o congregaciones de más de 50 personas (antes era de 100), resguardo domiciliario corresponsable para todos, aunque de manera estricta a los mayores de 60 años, hipertensos, diabéticos, embarazadas, es decir la población vulnerable.

Contradictoriamente algunos funcionarios federales en Tlaxcala persisten en hacer su santa voluntad, como la delegada del Bienestar, Lorena Cuéllar que mantiene sus convocatorias a actos masivos, así quedó constancia este martes en un audio que envió haciendo invitaciones a reuniones para la entrega de apoyos, y del cual Gentetlx tiene una copia.

Y si bien la federación habla de mantener los programas sociales, como parte de las acciones de gobierno que seguirán funcionando, una cosa es entregar los programas de forma directa y la otra sacar a la población vulnerable a los actos multitudinarios para la promoción de la señora.

Ahí están los videos, Cuéllar sigue promocionándose, se niega a enviar brigadas para entregar los apoyos, con tal de nutrir su clientela, sin duda este caso es patético.

NUEVO ORIZONTES 

A colación de la grilla política y sin importar estar en plena contingencia epidemiológica, al menos dos alcaldes del sur nos confiaron que fueron visitados por Cánovas, el virreinal asesor “estrella”.

Sin tapujos ni empacho fue claro, “Lore será candidata, aunque no sea por Morena”, le dijo a uno de los ediles al tiempo de ofrecerle desde una candidatura, hasta un puesto en el gabinete estatal, sí, de esos que ya ha repartido hasta por 10, como en la Segob donde hay al menos una decena de personajes que aseguran que serán los próximos secretarios.

Y luego, fiel a su estilo, vino la exigencia del súper asesor, se trata de integrarse a los trabajos de conformación y afiliación a la organización política Fuerza Social por México, que a mediados de este año obtendrá su registro como partido político, por cierto, satélite de Morena y de la 4T.