* La atinada asignación de Juan Antonio Martínez Guerrero como director de Ceresos en el Estado permite que la entidad se encuentre en paz

Comparado con entidades colindantes Tlaxcala registra mejores condiciones de control en los centros de readaptación social (Ceresos) que están ubicados en el municipio de Tlaxcala y Apizaco.

A pesar de los retos que enfrentan estos lugares, el gobierno del Estado, encabezado por Lorena Cuéllar Cisneros, ha logrado equilibrar las políticas de trabajo en los centros en respaldo a la readaptación de las personas privadas de su libertad (PPL).

La Politica de Seguridad y readaptación social que ha implementado el director de los Ceresos, Juan Antonio Martínez Guerrero ha permitido que los internos desarrollen prácticas que en un futuro les permitan les favorezcan su regreso a la sociedad.

De acuerdo con la información oficial, los Ceresos implementan talleres para que los PPL desarrollen sus habilidades y cuando obtengan su libertad puedan auto emplearse por medio de un oficio.

Los talleres que se desarrollan en los Ceresos están maquila, panadería panadería y carpintería por mencionar algunos sumado a otros talleres que les ayudan en su desarrollo físico, como clases de ejercicios.

En el estado el respeto a los derechos humanos es fundamental para lograr una reinserción social exitosa la cual es acompañada de actividades diversas, inclusive la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH), supervisa de manera periódica, los Ceresos para corroborar el respeto a las garantías individuales de los internos.

Según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), Tlaxcala es de las pocas entidades que registra un nivel óptimo en la población de internos, en los dos Ceresos que tiene, es decir, no hay sobre población, por tanto los internos están en espacios donde pueden interactuar con sus compañeros sin sentirse amontonados.