Por José Luis Ahuactzin

A pesar de que una, otra y otra vez los diputados locales de Morena, principalmente, quieran justificar que los recortes a Educación y Seguridad, principalmente, se deban porque eran para la caja chica del Ejecutivo; lo cierto es que fue para asignarse 250 millones de pesos de forma discrecional, pues en los hechos son absurdos.

Pero no sólo eso, también son incongruentes con la cuarta transformación y sus mandamientos, pues nos confirmaron que los nuevos ricos de Tlaxcala se dieron el lujo de viajar al extranjero en este periodo vacacional de diciembre.

Fuentes del Poder Legislativo nos informaron que el diputado que se considera como el mandamás del Congresito negro, el especialista en música, Víctor Manuel Báez, ni más ni menos que viajó a Italia pues ansioso estaba de llegar a visitar al Papa, como lo gritaba a los cuatro vientos entre sus compañeros morenistas.

Además de ello, a una reunión urgente de bancada citada para el miércoles pasado, no llegó, y pedía que mientras los diputados estaban en reunión de cuerpo presente, él lo hiciera vía telefónica…

¿Cómo la ven, chatos…?, dijera el ilustre Cantinflas.

Mientras que predican ser transparentes, exigen la rendición de cuentas, y hasta crean su propia ley de austeridad, en los hechos sólo 7 legisladores, han cumplido con la publicación de su declaración patrimonial, de intereses y fiscal de forma VOLUNTARIA, ¿y el resto -18-?

Los siete que tienen su declaración 3de3 son Michaelle Brito Vázquez, del PT; Maribel León Cruz, del PVEM; Omar Milton López Avendaño, del PAN; María Ana Bertha Mastranzo Corona, de Morena; Zonia Montiel Candaneda, del PRI; María de Lourdes Montiel Cerón, de Morena; y Luz Guadalupe Mata Lara, del PANAL.

Es así como los diputados lejos de ajustarse el cinturón para beneficiar partidas a fortalecer rubros como Salud, Seguridad o Educación,  se repartieron tremenda roscota de 250 millones de pesos.