Participación de Tlaxcala en un proyecto regional contra el calentamiento urbano.

Por Stephany Rodríguez

El secretario de Medio Ambiente del Estado de Tlaxcala, Pedro Aquino Alvarado, informó que la entidad forma parte de un estudio regional sobre las denominadas “islas de calor”, impulsado por la Comisión Ambiental de la Megalópolis (CAME), sin que hasta el momento se hayan presentado resultados o avances públicos más allá de la contratación de investigadores.

El proyecto busca detectar zonas con mayores picos de temperatura dentro de las áreas urbanas y analizar su relación con factores como la contaminación, la pérdida de biodiversidad o el consumo de combustibles. Sin embargo, Aquino reconoció que las investigaciones apenas iniciaron y que los datos disponibles sobre emisiones en la zona metropolitana corresponden a estudios anteriores a 2022, lo que deja un vacío actualizado sobre la situación ambiental actual del estado.

Entre los municipios considerados, Zacatelco fue señalado como punto de interés por su cercanía con la zona industrial de Puebla. El secretario explicó que el objetivo es determinar si los incrementos de temperatura están vinculados a fuentes industriales o al tránsito vehicular, aunque no se ha precisado un calendario de entrega de resultados ni medidas de mitigación inmediatas.

En relación con el manejo de residuos y los rellenos sanitarios, Aquino informó que el proceso de contratación para los nuevos proyectos aún no concluye, a pesar de que las clausuras y sustituciones se consideran urgentes. De acuerdo con el propio funcionario, la complejidad del proceso y la falta de proveedores especializados han retrasado las acciones, dejando la ejecución bajo responsabilidad de la Secretaría de Infraestructura y la Oficialía Mayor del Gobierno del Estado.

Asimismo, la dependencia continúa elaborando inventarios de residuos y reportes de emisiones que, según el secretario, deberán publicarse entre enero y marzo del próximo año como parte de los compromisos internacionales de transparencia.

A pesar de los anuncios sobre la colaboración federal y la selección de Tlaxcala para proyectos de economía circular, no existe todavía una viabilidad técnica aprobada ni fechas concretas de arranque. Los estudios y trámites permanecen en revisión, mientras los retos ambientales del estado como la contaminación, el manejo de desechos y la regulación industria continúan sin resolverse en el corto plazo.