13 de julio - 2025

Mexicanos, incluidos habitantes de Tlaxcala, coleccionan el billete del ajolote.
Por Stephany Rodríguez
El billete de $50 se vuelve un “tesoro nacional” y en Tlaxcala también lo atesoran
El billete mexicano de 50 pesos, ilustrado con un ajolote, maíz y los canales de Xochimilco patrimonio de la humanidad, no solo cumple una función monetaria: se ha convertido en objeto de colección por su diseño, especialmente entre habitantes de estados como Tlaxcala.
De acuerdo con el Banco de México (Banxico), cerca de 11.2 millones de pesos están actualmente fuera de circulación debido a que los mexicanos guardan estos billetes. Una encuesta reveló que el 4% de la población los colecciona, y el 23% simplemente los guarda, por razones que van desde la estética hasta el valor emocional.
En entrevista, ciudadanos de Tlaxcala confirmaron esta tendencia. Ana María, compartió que tiene guardados más de diez billetes del ajolote: “Se me hacen bonitos, parecen de colección, y a mis hijos les encantan.”
Sin embargo, no todos comparten esta costumbre. Luis, un comerciante de Tlaxcala, señaló que prefiere usar el billete para sus compras cotidianas y no guardarlo: “Para mí es dinero, no una pieza de colección. Si lo guardas, no circula y no ayuda a la economía. Mejor que se use para lo que sirve, para pagar y comprar.”
Según Banxico, el 69% de los encuestados dijo que guarda el billete porque “el diseño está bonito y les gusta”, lo que representa más de 8.6 millones de pesos. Otro 10% lo ve como una forma de ahorro, mientras que un porcentaje similar considera que puede aumentar su valor a futuro. Incluso hay quienes los ven como una inversión: el 5% espera venderlos más caros, y el 1% los guarda para obsequiarlos.
La encuesta de Banxico fue realizada entre el 26 de octubre y el 11 de noviembre de 2024, con 2 mil 60 entrevistas en viviendas a nivel nacional y un margen de error del 5%. El estudio completo puede consultarse en los resultados de estudios cuantitativos y cualitativos sobre efectivo 2024.
Mientras tanto, en hogares tlaxcaltecas y de todo el país, el billete rosa del ajolote sigue siendo mucho más que un medio de pago: es un símbolo que muchos prefieren guardar, mirar y atesorar.
