13 de julio - 2025

Expertos advierten que el estigma y la falta de diagnóstico oportuno dificultan el desarrollo de niñas, niños y jóvenes.
Por Stephany Rodríguez
En el marco del Día Internacional del Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH), especialistas en salud mental y ciudadanos tlaxcaltecas coincidieron en la necesidad de visibilizar esta condición neurológica, aún poco comprendida en la entidad, y de garantizar un diagnóstico temprano que permita brindar atención integral a quienes la presentan.
El psicólogo clínico Luis Ángel Ortega, especialista en neurodesarrollo infantil , explicó que el TDAH es un trastorno del neurodesarrollo que afecta principalmente la autorregulación de la conducta, la atención sostenida y el control de impulsos. “Contrario a la creencia popular, no es un comportamiento voluntario ni una cuestión de mala educación. Se trata de una condición clínica que requiere evaluación profesional y un enfoque terapéutico multidisciplinario”, señaló.
De acuerdo con Ortega Sánchez, aunque el TDAH puede detectarse desde la infancia, en muchos casos el diagnóstico se retrasa por desconocimiento tanto en las familias como en el ámbito escolar. “Hay docentes que confunden los síntomas con desobediencia o bajo rendimiento académico, lo que dificulta una detección oportuna. En Tlaxcala, aún falta formación especializada en las escuelas y en los servicios de salud pública”, advirtió.
Testimonios locales reflejan barreras estructurales
Beatriz Nava, madre de un adolescente diagnosticado con TDAH, narró que el proceso de identificación fue largo y complicado. “Durante años, su comportamiento fue atribuido a la pereza o la rebeldía. Tuvimos que acudir a una consulta privada para tener claridad. Con tratamiento y acompañamiento terapéutico, ha mejorado significativamente, pero el camino no fue fácil”, comentó.
En una experiencia similar, Ana Laura Gutiérrez, fue diagnosticada con TDAH a los 20 años. “Siempre pensé que yo era el problema. Me costaba mucho trabajo organizarme, terminaba tareas a última hora o me distraía con facilidad. Viví muchos años con ansiedad sin saber la causa. Recibir un diagnóstico cambió mi perspectiva y me ayudó a tomar decisiones informadas sobre mi salud”, expresó.
Ambos testimonios coinciden en que la atención privada fue clave, dado que los servicios públicos no ofrecieron alternativas inmediatas. Aunque algunas instituciones, como el DIF Estatal o el Hospital Infantil de Tlaxcala, brindan atención psicológica, los tiempos de espera y la falta de especialistas en neurodesarrollo limitan el acceso efectivo al tratamiento.
Importancia del diagnóstico y la intervención temprana
El psicólogo Ortega detalló que el tratamiento del TDAH no es uniforme para todos los casos, pero suele combinar terapia cognitivo-conductual, intervenciones psicoeducativas y, en algunos casos, medicamentos prescritos por especialistas. “El objetivo es mejorar la calidad de vida de las personas, favorecer su desarrollo personal, académico y social, y prevenir riesgos asociados como la baja autoestima, la deserción escolar o los trastornos de ansiedad”, explicó.
Además, hizo un llamado a que las autoridades educativas y de salud en Tlaxcala incluyan al TDAH dentro de los programas estatales de salud mental infantil, y promuevan campañas de sensibilización para reducir el estigma que aún rodea a esta condición.
Un llamado a la conciencia pública
El Día Internacional del TDAH se conmemora cada 13 de julio con el propósito de fomentar la comprensión sobre este trastorno y promover entornos inclusivos para quienes lo presentan. En Tlaxcala, especialistas y familias insisten en que visibilizar el TDAH es un paso fundamental para garantizar una atención oportuna y efectiva.
¿Qué es el TDAH?
El Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad es una condición neurológica que afecta el desarrollo de habilidades como la atención, el autocontrol y la organización. Se estima que entre el 5 y 7 % de la población infantil a nivel mundial presenta este trastorno, aunque puede continuar durante la adolescencia y la vida adulta.
