26 de febrero - 2025

Ciudadanos rechazan cambios constitucionales; cuestionan postergación hasta 2030.
Por Stephany Rodríguez
La reciente reforma constitucional aprobada en el Senado de la República, que prohíbe la reelección consecutiva en cualquier cargo de elección popular y el nepotismo, ha generado un fuerte rechazo entre ciudadanos tlaxcaltecas, quienes cuestionan tanto su implementación como el hecho de que entre en vigor hasta 2030.
El gobierno federal, encabezado por la presidenta Claudia Sheinbaum, impulsó esta iniciativa con el argumento de reducir la corrupción en el sistema político mexicano. No obstante, la modificación de última hora para postergar su aplicación hasta la siguiente década ha despertado sospechas entre sectores de la oposición y la sociedad.
Críticas en la capital tlaxcalteca
En un recorrido por la capital de Tlaxcala, varios ciudadanos expresaron su inconformidad con la reforma. Algunos consideran que la prohibición de la reelección limitará la continuidad de proyectos en municipios y estados, mientras que otros creen que el retraso en su aplicación beneficia a ciertos políticos en funciones.
“Nos vendieron esta reforma como una forma de frenar el nepotismo y la corrupción, pero si realmente quieren cambiar las cosas, ¿por qué esperar hasta 2030? Parece que están protegiendo a ciertos políticos que todavía quieren seguir en el poder”, criticó Álvaro Sánchez, maestro de una preparatoria.
Por su parte, Ángela Teresa Domínguez, Lic. en derecho, opinó que la reelección no ha significado un avance para la ciudadanía. “Dicen que con la reelección los políticos iban a rendir cuentas, pero en estos años solo hemos visto los mismos rostros sin mejorar la situación del país y del estado. “Me parece bien que la eliminen, pero que lo hagan ya, no dentro de cinco años”, afirmó.
Otro ciudadano, Juan Carlos Herrera, cuestionó la coherencia del gobierno. “Esto nos lo vendieron durante la campaña, nos dijeron que la reforma entraría en vigor pronto para acabar con el nepotismo.” Pero ahora que ya están en el poder, misteriosamente los diputados la aprueban, no para 2027, sino hasta 2030. “Nos engañaron”.
El retraso en la aplicación de la reforma ha sido señalado como una concesión de Morena y sus aliados a ciertos grupos políticos.
La presidenta Sheinbaum reconoció en conferencia de prensa de esta mañana que su propuesta inicial contemplaba la aplicación para 2027, pero justificó el cambio como una decisión de los legisladores. “Mi posición sigue siendo que debería aprobarse en 2027, pero entiendo que fue un acuerdo entre los partidos para lograr la mayoría”, explicó.
Mientras la reforma avanza para su ratificación final, en Tlaxcala el debate continúa. El descontento de varios ciudadanos persiste, especialmente por la postergación de la reforma hasta 2030.
