‘Es un tema de dinero’, justificó el titular de SMyT

Por Selene Sosa

Juan Tapia Pelcastre, responsable de la Secretaría de Movilidad y Transporte (SMyT), reconoció que las promesas de los concesionarios en temas de seguridad y renovación de unidades, no han sido cumplidas puesto que “es un tema de dinero”, esto pese a que desde diciembre se permitió el incremento a la tarifa del pasaje en el transporte público.

Desde el inicio de la administración estatal que encabeza Lorena Cuéllar Cisneros, diferentes agrupaciones de concesionarios solicitaron el aumento de dos pesos al costo del pasaje, incluso realizaron significativas movilizaciones en repetidas ocasiones con la misma exigencia.

Uno de los compromisos de los concesionarios, a cambio de incrementar la tarifa en cuestión, fue equipar las unidades con cámaras de video vigilancia y botón de pánico, así como la renovación del propio parque vehicular, a fin de ofrecer un mejor servicio al usuario.

Así, a finales de diciembre del año pasado, el Gobierno del Estado, concedió el aumento de un peso a la parada mínima y 35 centavos por kilómetro adicional, sin embargo, tras tres meses de esto, los usuarios no han visto el cumplimiento a las promesas de los concesionarios.

Ello fue cuestionado por medios de comunicación al relevo de Luz María Vázquez Ávila, primera titular de la SMyT, quien, tras un fallido intento por evadir los cuestionamientos, reconoció que a la fecha no se han cumplido porque dichos compromisos son “un tema de dinero”.

Tapia Pelcastre recordó que, por Norma, las unidades de transporte público en servicio no pueden tener una antigüedad mayor a 10 años, sin embargo, antecesores al frente de la dependencia local en cuestión firmaron un acuerdo con los concesionarios concediéndoles cinco años más “de gracia”, por lo que se admiten unidades modelo 2008.

“Aquí es un tema de dinero, una unidad en promedio, está arriba o roza los 600 mil pesos, unidades nuevas, entonces, pues el transportista se queja de que no tiene el recurso para adquirir una unidad nueva”, expuso.

Ante tal situación, el secretario de movilidad adelantó que la dependencia a su cargo está preparando una propuesta “que pueda acompañar esta adquisición de vehículos” a través de un fideicomiso que “se constituya en aval, no en pagador”, así, los concesionarios podrían adquirir nuevas unidades y, en caso de no pagar, habría una penalización, la cual podría ser el “secuestro” de la propia unidad o la cancelación de la concesión.

Respecto al tema de seguridad, el funcionario igualmente justificó que se trata de una situación de carácter económico, puesto que, aseguró, los concesionarios tienen la disponibilidad de cumplir sus propias promesas, empero, agregó, el gobierno requiere acompañarlos ya que “por sí solos va a estar complicado”.

Bajo este orden de ideas, Juan Tapia reconoció que, la propuesta de la implementación de cámaras de video vigilancia y el botón de alerta, es más viable puesto que requiere una inversión menor, entre 10 mil y 12 mil pesos, lo que vislumbró como accesible para los concesionarios.

“Hasta el momento, siendo honestos, no se ha iniciado con ese programa de seguridad… en promedio, instalar ese tipo de equipamiento a las unidades que actualmente circulan, rondan los 10 mil 12 mil pesos; Yo creo que, con base en estos comentarios que nos hacen, pues mientras se cambien o no las unidades, vamos a proponerles a los dueños de ellas que puedan instalar este tipo de equipos”.

Hay que recordar que, en la Zona Sur del Estado, unidades de transporte público y usuarios han denunciado una creciente ola de asaltos, a lo que el funcionario de movilidad, respondió que no basta con el equipamiento, sino que es preciso establecer el enlace con el C4, “porque si no de nada sirve”.