Por Edgardo Cabrera

En el PAN tienen la brújula descompuesta, el domingo ante la convocatoria nacional para la defensa del INE quedó claro que a los albiazules tlaxcaltecas les puede más la comodidad de sus oficinas, los auditorios, o los manteados, que las calles o el Zócalo donde el sol, la lluvia, el frío o el viento les afecta el peinado.

Lo anterior viene a colación porque en el Tlaxcala que “ellos desean” los cuestionamientos a los gobiernos morenistas son solamente para salir al paso y justificar los millones de pesos que reciben para tareas políticas en el bando opositor, sin embargo, son claras las concesiones al oficialismo, “para que no se enoje la señora gobernadora”.

Por medio de un comunicado de prensa el Partido Acción Nacional y su dirigencia no se quisieron quedar fuera de la exitosa protesta nacional en respaldo al INE y en contra de las reformas de López Obrador y de su partido Morena para restarle facultades y debilitarlos de cara a las elecciones del año 2024.

Mientras otros opositores como los priístas y los perredistas marcharon, con poca o mucha convocatoria -dependiendo del cristal con el que se mira-, el otro partido que se supone es opositor simplemente convocó a un puñado de representantes de sus estructuras para sacarse la foto vestidos de rosa y tener así la imagen para boletinar.

En contraste, miembros de este partido y liderazgos como Adriana Dávila o la senadora Minerva Hernández, prefirieron acudir al Zócalo de la ciudad de México porque en Tlaxcala su dirigencia no ha logrado, ni intentado integrar a todos a la toma de decisiones y a las acciones.

¿ASÍ QUIEREN GANAR?

Recordemos que semanas atrás los panistas convocaron a un mitin encabezado por su dirigente nacional Marko Cortés para lanzar una campaña de posicionamiento del instituto, cuyo lema es el “Tlaxcala que deseas”, lo dijimos, se equivocaron cuando en lugar de mostrar respeto a sus aliados y humildad al reconocer que carecen de capital político así como de estructura, vociferaron que solos ganarían la mitad de las presidencias municipales que se disputan en el año 2024, a sabiendas que solo gobiernan 3 actualmente y tienen un diputado pluri.

Y es que, si son incapaces de integrar a sus escasos militantes, y aún más escasos liderazgos, de qué manera podrán convertirse en una opción para aquellos que no están de acuerdo en la forma de gobernar con Morena, aún más, cuando en el discurso dicen una cosa y en los hechos buscan por todos lados congraciarse con la mandamás Cuéllar.

Los asesores panistas deben entender que no sólo con comunicados o ruedas de prensa van a traer a los ciudadanos, como partidos políticos su tarea es en otro nivel, no olvidemos que tienen representación en el Congreso local y en las presidencias municipales, pero también en el plano federal donde se esperaría que lleven a hechos no solamente dichos las inconformidades por las malas acciones y decisiones de gobierno.

Ya veremos cómo actúan el 8 de marzo, porque al frente de los partidos políticos se encuentran varias mujeres y al menos se esperaría sororidad con el movimiento, no colgarse de él, pero si solidaridad y acciones concretas en defensa de ellas. El PAN, PRI, y Redes Sociales, que se supone tienen posturas opositoras, son encabezados por mujeres, no lo olvidemos.

A colación, en el caso de Movimiento Ciudadano, vendido como la tercera vía, a ver si a su dirigente Cuco Rivas no se le ocurre la genial idea de hacer su propia marcha a favor del INE en próximas fechas. Recordemos que hasta octubre pasado salió con un reducido número de personas entre ellos el expriísta Ernesto Ordóñez para simplemente hacer el ridículo, no logro sumar a reconocidas mujeres activistas como Eréndira Jiménez, por cierto, su ex candidata a la gubernatura.