9 de febrero - 2023

Por Edgardo Cabrera
Antes de que echen las campanas al vuelo y aplaudan el cinismo y la mediocridad, la comparecencia de este miércoles en el Congreso local evidenció, una vez más, que el primer informe de gobierno de Lorena Cuéllar está plagado de mentiras e inconsistencias.
En Turismo la exposición de Josefina Rodríguez Zamora la dejó confesa en cuanto al desvío de recursos, plagio, uso faccioso de la promoción gubernamental en beneficio de una familia, ¡su familia!, y la falsificación de información pública.
La ganadera, antes que funcionaria y servidora pública, así nos los dejó bastante claro hoy, no tuvo empacho en admitir que en reiterados eventos promocionados por el gobierno -según dijo “no organizados por Turismo”-, los Zamora y su hotel-hacienda-campo de golf-complejo residencial-restaurante-y tianguis, fueron beneficiados.
Lo mismo por un fracasado festival de globos que la filmación de múltiples videos promocionales que costaron muchos millones de pesos al erario, y ahora, para rematar, también tienen un museo del pulque, eso sí, para tranquilidad del “pueblo”, todo fue inversión privada.
No obstante, de ser cierto que no gastó nada Secture en esos eventos, el desvío de los recursos públicos podría estar también en la intensa promoción con recursos públicos: ¿acaso promocionan la fonda de la esquina, el hotel Apizaco o Piedra revuelta (por ponerles nombres), o el restaurante Avenida Cisneros?, ¡no!, es claro el negocio para qué y quién.
MINTIERON
Cada minuto de su intervención, la secretaria Josefina confesó más inconsistencias, su incontinencia verbal nos mostró, por ejemplo, que el video musical de Carlos Rivera denominado “Te Soñé”, sí le costó al gobierno de la Triste Historia, 4 millones 106 mil pesos.
Sin embargo, en la respuesta a una solicitud de información pública, el diputado perredista Juan Manuel Cambrón evidenció que el pasado 21 de octubre la Secretaría Turismo dijo que solamente “brindaron apoyo”, con lo que tácitamente negaron algún gasto, y eso, debe ser investigado y generarle responsabilidad a la funcionaria por mentir y faltar con ello a la ley en la materia.
En cuanto a más favoritismo para su prole, también admitió que su papá, propietario y ganadero de Atlanga se benefició de contratos para festejos taurinos, “¡pero no me lo pagaron a mí!”, dijo para tratar de aliviar la culpa.
Además, habló de una empresa denominada “Casa Toreros» que “depende” del patronato, como otra de las beneficiadas, ¡ah caray!, y de cuando acá el gobierno crea empresas sin antes pasar por la revisión del Congreso, además, en la cuenta pública del 2022necesitaríamos conocer sus estados de ingresos, egresos, cumplimiento de metas, objetivos y otros tantos requisitos que revisa con lupa el OFS.
Y para rematar, la diputada Alejandra Ramírez evidenció el desprecio de la funcionaria por la cultura y las raíces tlaxcaltecas, toda vez que en su exposición inicial volvió a presumir tanto el complejo de capital privado -no tlaxcalteca- denominado Val’Quirico, como el plagio de la frase “sí existe”, como marca oficial.
De lo primero, la legisladora dijo que “La Toscana” no representa a Tlaxcala, y del “sí existe”, fue de nuevo el diputado Cambrón que recordó que ese hashtag fue creado por el equipo de futbol Coyotes, cuyo publicista, evidenció en su momento el plagio que ahora tanto orgullo les da, pero con pésimos resultados en promoción y atracción de turistas noche, es más, es tan malo que ya ni el equipo lo utiliza.
