Por Edgardo Cabrera

Los senadores candidateables a la gubernatura, Ana Lilia Rivera y Joel Molina estuvieron el viernes junto al presidente López Obrador en el templete instalado en Apizaco.

El gobernador Marco Mena, el anfitrión y alcalde de Apizaco Julio Hernández, así como el diputado federal por el distrito I, José de la Luz Sosa, fueron los políticos locales que también fueron colocados por AMLO en el aparador del pueblo.

Y seguramente las plumas ladinas y pagadas por la virreina inventarán mil y un pretextos para justificar la ausencia de su patrona en el templete (pese a que pregonaron que tendría un lugar preferencial), pero lo cierto es que en la Presidencia no están muy contentos con su trabajo.

Tan es así que no mereció ninguna mención la coordinadora de programas federales en Tlaxcala, y menos se citaron datos concretos del avance en la entrega de los apoyos sociales, porque simple y sencillamente no se llegó a la meta exigida.

Para rematar, cuando el presidente la buscó para atender una demanda ciudadana NO la encontró, por lo que instruyó al senador Joel Molina -que estaba a su lado- hacerse cargo del tema, de ahí que no se llevara un buen sabor de boca de lo que está haciendo su funcionaria en la entidad. 

NADA NUEVO

Recordemos que por la ineficacia de la delegación del Bienestar se tuvieron que entregar en efectivo recursos económicos, que se supone tendrían que caer en automático en tarjetas bancarias.

También por esa mala labor las oficinas centrales de la Secretaría del Bienestar instruyeron la revisión del padrón toda vez que no están los que deberían estar, y eso sí, hay muchos que no cubren los requisitos estipulados.

Lo cierto es que con quien mostró muy buena actitud fue con los senadores Ana Lilia Rivera y Joel Molina, quienes hasta el momento han cumplido con las indicaciones presidenciales y la línea del actual gobierno.

Por ello no es extraño que Joel Molina se haya convertido en uno de los principales vínculos de comunicación entre la administración de Marco Mena y la federal. 

A colación, y ante la falta de resultados en su labor, este lunes Lorena Cuéllar se colgó del triunfo de Barbosa en Puebla, dice que eso “la fortalece”, ¡ah caray!, de nuevo, como sus encuestas engañabobos, quiere tomarnos el pelo. No perdamos de vista que el virtual gobernador cayó estrepitosamente en número de votos en comparación con la pasada elección y el abstencionismo llegó a casi 70 por ciento.

Y ese cuento de que Puebla ayuda a ganar en Tlaxcala es también falso, lo mismo decía en 2016 cuando presumía que el difunto Moreno Valle la apoyaba para ganar… 

GANADOR

Regresando a los apuntes de la visita de AMLO la semana pasada, sin duda, el gran ganador de la gira del presidente fue el gobernador Marco Mena.

El mandatario estatal ha recurrido a la buena política para entablar una relación respetuosa y fructífera con el Ejecutivo federal.

Por ello, en la primera gira oficial de López Obrador a Tlaxcala, comprometió más de 600 millones de pesos para carreteras. Y en esta segunda ocasión, logró que el gobierno federal apoye la operación del Programa Supérate, para que Tlaxcala sea el primer estado que logre bajar al mínimo la pobreza extrema en Tlaxcala. 

Es evidente que Marco Mena está en el ánimo del presidente, y la prueba está en que elogió que su gobierno mantenga a Tlaxcala como la única entidad con deuda cero. 

Seguramente vendrán cosas buenas para los tlaxcaltecas; ojalá que otros actores entiendan el mensaje que, más que grillas, lo que el presidente quiere es trabajo y resultados.