Personal del SNTE advierte riesgos y afectaciones laborales mientras recuerdan recientes percances en rutas de transporte de trabajadores.

Por Stephany Rodríguez

En Tlaxcala, la preocupación entre el magisterio creció luego de que coordinadores educativos de la Sección 31 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) denunciaron que la Secretaría de Educación Pública del Estado (SEPE) pretende sustituir los autobuses que por más de tres décadas han utilizado para su traslado por unidades tipo microbús cuya empresa es propiedad de un ex alcalde de Zacatelco.

De acuerdo con personal convocado el pasado jueves alrededor de 70 coordinadores, funcionarios de la SEPE informaron que el cambio sería obligatorio y que, en caso de no aceptarlo, el beneficio de transporte podría ser retirado. Los trabajadores insistieron en que el servicio está establecido en minutas firmadas desde febrero de 2022, por lo que cualquier modificación tendría que pasar por un proceso de análisis y consenso entre la autoridad educativa y la representación sindical.

La Sección 31 recordó que el programa de transporte se sostiene mediante cuotas sindicales y aportaciones de los propios beneficiarios, por lo que su eventual sustitución sin diálogo implicaría un debilitamiento del esquema que ha operado durante décadas.

La molestia sindical se intensificó al señalar que esta propuesta surge en un contexto reciente de accidentes relacionados con el transporte de personal en el estado cuyas unidades ahora pretenden utilizarse para los docentes.

El más reciente ocurrió el 4 de marzo de 2025, cuando un autobús con trabajadores de una empresa privada que se dirigían a Condumex salió del camino y cayó por un barranco de más de 30 metros en la carretera Tlaxcala–Temetzontla, en Panotla. El percance dejó al menos 21 lesionados, cuatro de ellos trasladados a un hospital.

De acuerdo con informes preliminares, una aparente falla mecánica derivó en la pérdida de control del vehículo en una zona de curvas pronunciadas.

El aparato operativo de rescate incluyó a elementos del Ejército, bomberos y cuerpos de emergencia, quienes confirmaron que cerca de 30 pasajeros viajaban en la unidad.

Aunque no hubo víctimas mortales, el accidente reavivó el debate sobre las condiciones de seguridad del transporte laboral en la entidad.

Ante este panorama, el gremio magisterial solicitó a la SEPE mantener el servicio bajo las condiciones actuales y garantizar que cualquier ajuste sea discutido de manera institucional, recordando que los antecedentes recientes obligan a priorizar la seguridad, no a reducirla.