4 de mayo - 2025

Especialistas en salud advierten que su consumo habitual entre jóvenes puede provocar enfermedades crónicas.
Por Stephany Rodríguez
El consumo de bebidas energizantes se ha normalizado entre jóvenes y adolescentes tlaxcaltecas, especialmente como una forma de mantenerse activos durante el día o complementar su rutina escolar y social. Sin embargo, especialistas en salud alertaron sobre los severos riesgos que estas bebidas representan para el organismo.
Alejandra García González, especialista en promoción de estilos de vida saludables, explicó que estos productos contienen altas concentraciones de edulcorantes, azúcares y calorías que, con el tiempo, pueden desencadenar enfermedades como diabetes tipo 2, afecciones cardiovasculares y trastornos digestivos.
“Muchas personas piensan que estas bebidas les ayudan a rendir más, pero la realidad es que alteran el metabolismo, afectan la salud intestinal y pueden tener consecuencias en el estado de ánimo y la salud mental”, afirmó.
Además del daño interno, García González destacó que el hábito de consumir bebidas energizantes suele ir acompañado de otros productos ultraprocesados, como botanas fritas, dulces y alimentos con exceso de sodio, lo que potencia los efectos negativos.
Frente a este panorama, recomendó optar por alternativas más seguras, como sueros de vida oral sin edulcorantes o bebidas naturales, además de mantener una alimentación equilibrada.
La especialista también hizo un llamado a madres, padres y tutores para involucrarse en los hábitos alimenticios de sus hijas e hijos, ya que las combinaciones de productos aparentemente inofensivos como frutas con gomas, cacahuates o salsas pueden convertirse en una amenaza para su salud a largo plazo.
“Se necesita una estrategia conjunta desde las escuelas y los hogares para transformar estos hábitos. Lo que hoy parece una moda o una rutina, mañana podría derivar en un problema de salud crónico”, advirtió.