1 de enero - 2025
Por Edgardo Cabrera
De qué tamaño será el capricho, que Marrufo el Marino enfureció cuando se develó que su secre particular, la que no es policía, se ganó tramposamente uno de los dos autos rifados a los uniformados en su día, y ahora emprendió una cacería en contra de su personal y directivos a los que culpa de la filtración.
Resulta que en lugar de estar ocupado en combatir la delincuencia está más preocupado en atender los berrinches de su pareja de baile. Solamente el penúltimo día del año se liaron a balazos malandros en Teolocholco, en Acuitlapilco atracaron a joyeros y los golpearon severamente, mientras que el decomiso de huachigas en Altzayanca, presumido el pasado 26 de diciembre, se les puede caer dado que los estatales y marinos carecían de orden de cateo, además no hubo detenidos.
Ahí no acaba, en su sed de venganza, al interior de la corporación el Marino mandó a citar a una reunión de trabajo a directoras y jefas de departamento (llama la atención que solo fueran mujeres), a las que prohibió buscarlo directamente para tratar cualquier asunto y les advirtió que su “capricho” está facultada para atenderlas en sus requerimientos, tomar decisiones y, de ser necesario, programarles cita con su majestad, el virrey importado de Quintana Roo, vale recordar el desastre que dejó en Chetumal.
Colegas de aquella zona nos confirman que a su paso por la corporación municipal, al igual que aquí, hubo desbandada de personal y en menos de un año, que es lo que duró, presumió crear comités vecinales para que la gente se hiciera cargo de su propia protección. Aquí, recordemos, además de déficit de personal, en su haber tiene el linchamiento de dos uniformados, crimen del cual fue absuelto de toda responsabilidad, lo que evidencia que poco le importa la tropa.
PRIVILEGIOS
A colación del desastre de esta triste historia que gobierna, y como si no fuera prioritario eficientar la escasa fuerza policíaca con la que contamos, resulta que patrullas y personal son asignados a proteger a funcionarios, familias del poder y hasta a supuestos “asesores” que cobran millonadas del erario con sus empresas.
Es el caso de quien se autodenomina “estratega político de la gobernadora”, al menos así se presenta con cuanto incauto cae en sus redes, es el mismo traído de Ciudad de México y que le hace esos videos carísimos, bofos y fofos, los de la misma secuencia, solo que con diferentes actores y escenarios, cuya empresa recibe 300 mil pesos mensuales y su personal, ocho para ser precisos, están en la nómina del gobierno.
Resulta que desde hace meses, una patrulla y policías fueros colocados al exterior de una más de las propiedades de la mujer más rica de Tlaxcala y que le prestó a Serch Mayorca, bueno eso dicen, igual y del propio gobierno pagan la supuesta renta. ¿Pues no que estamos en el estado más seguro?, ¿Por qué el estratega tiene seguridad, a qué le teme?
No solo eso, en otra de las propiedades, esa ubicada en un fraccionamiento muy fifí de Ocotlán, también fue dispuesta otra unidad policial para cuidar a otra privilegiada del poder, a eso sumele todas las unidades que se destinan a cuidar a la familia real y a funcionarios en otra residencia ubicada en Panotla.