El gobierno de México prioriza el rescate del Zahuapan-Atoyac como parte de un plan integral para garantizar el acceso equitativo al agua.

Por Stephany Rodríguez

La presidenta Claudia Sheinbaum presentó el Plan Nacional Hídrico, un proyecto que redefine la política hídrica de México al priorizar el acceso al agua como un derecho humano y no como una mercancía. Este plan contempla el rescate de los ríos más contaminados del país, entre ellos el Zahuapan-Atoyac, que cruza los estados de Tlaxcala y Puebla.

“Estamos dejando atrás la visión neoliberal que trataba al agua como un negocio. Ahora la vemos como un bien de la nación y un derecho fundamental”, señaló Sheinbaum durante su intervención en la conferencia matutina.

El titular de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), Efraín Morales López, explicó que el plan inicia con el saneamiento de los ríos Lerma-Santiago, Tula y Atoyac-Zahuapan, considerados los más contaminados del país. Las acciones incluirán la eliminación de descargas tóxicas, la construcción de plantas de tratamiento, reforestación y la implementación de humedales artificiales para restaurar los ecosistemas.

Además, el Plan Nacional Hídrico se sustenta en cuatro ejes estratégicos:

1. Gestión justa del agua: Regular concesiones y promover la devolución voluntaria de volúmenes no utilizados.

2. Eficiencia agrícola: Modernizar los sistemas de riego para optimizar el uso del recurso en el campo.

3. Infraestructura compartida: Colaboración entre el Gobierno Federal, estados y municipios para mejorar la distribución de agua potable.

4. Sustentabilidad ambiental: Mitigar los efectos del cambio climático y promover proyectos que equilibren desarrollo y medio ambiente.

El programa arrancará oficialmente el 25 de noviembre, con la firma del Acuerdo Nacional por el Derecho Humano al Agua y la Sustentabilidad, evento que marcará el inicio de una estrategia integral que busca no solo recuperar los cuerpos de agua, sino también garantizar su acceso equitativo para todos los mexicanos.

Con estas acciones, el gobierno busca dar un giro radical en la gestión hídrica del país, restaurando ríos vitales como el Zahuapan-Atoyac y enfrentando años de abandono y contaminación que han afectado severamente a las comunidades aledañas.