Senadores incluyen en la terna a Rosario Piedra

Cortesía Fabián Robles/Faronoticias

Paulina Hernández Diz, Nashieli Ramírez Hernández y la actual ombudsperson Rosario Piedra Ibarra, conforman la terna elaborada en comisiones unidas de Derechos Humanos y Justicia del Senado de la República para renovar la presidencia de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH).

Con esa decisión la ombudsperson tlaxcalteca Jakqueline Ordóñez Brasdefer se habría quedado con las ganas de encabezar ese organismo autónomo nacional para el periodo que va del 16 de noviembre de 2024 al 15 de noviembre de 2029.

La presidenta de la Comisión Estatal de Derechos Humanos de Tlaxcala (CEDHT), por su cercanía política y familiar con la gobernadora Lorena Cuéllar Cisneros, no ha querido resolver los expedientes que, durante los últimos tres años, supuestamente ha abierto el organismo por la evasión de migrantes -15 de ellos menores de edad que viajaban solos- que se encontraban en albergues del DIF estatal en espera de resolver su situación legal en el país.

La presidenta del organismo autónomo es esposa del magistrado de justicia administrativa Manuel Vázquez Conchas, quien a su vez es hermano del diputado federal morenista Raymundo, esposo de Mónica, hermana de la mandataria, mientras que el DIF estatal es encabezado de manera honorífica por una hija de la gobernadora.

Desde ayer, al concluir la sesión de comisiones unidas, comenzó a circular el dictamen por el que se propone la terna de candidatas a ocupar la presidencia de la CNDH. La designación de quien asumirá esa comienda debe darse en el pleno de la Cámara Alta del Congreso de la Unión el próximo 8 de noviembre por voto de dos terceras partes de los senadores presentes.

Lo que llamó la atención -sobre todo de organizaciones, activistas y académicos-fue la inclusión en la terna de la actual ombdusperson Rosario Piedra, quien a toda costa y con el apoyo de los partidos afines a Morena, busca reelegirse, pese a su cuestionado papel al frente del organismo durante los últimos años.

La sorpresa también radica en que, de la lista de los cinco aspirantes mejor evaluados, el nombre de la actual presidenta de la CNDH ni siquiera figuraba, de ahí la inferencia de que fue incluida con el claro propósito de Morena para mantenerla en el cargo.

Inicialmente esa lista estaba integrada en este orden: Nashieli Ramírez Hernández (15 votos conforme a evaluación según indicadores), Tania Ramírez Hernández (12 votos, a pesar de los cuales fue excluida de manera inexplicable de la terna), Paulina Hernández Diz (11 votos), Karla Alejandra Obregón Avelar (siete votos) y Carlos Pérez Vázquez (seis votos).

Los indicadores evaluados fueron: experiencia y conocimiento en materia de derechos humanos; autonomía, independencia política o partidaria; apertura ideológica; integridad pública; atención de manera adecuada de casos prácticos; se valoró también si en sus respuestas de la evaluación respectiva presentaron un razonamiento crítico; se evaluó si garantizan compromiso de trabajo colaborativo con el consejo consultivo y la sociedad civil; y consideraron compromisos con la progresividad de los derechos humanos.