3 de octubre - 2024
Por Mauricio Hernández Olaiz
No importa el tamaño del suceso o acontecimiento, no importa su repercusión en la sociedad, no importa si es un levantado, ejecutado, secuestrado, torturado, quemado, embolsado, no importa si desapareció, no importa si es hombre o mujer, no importa si la ejecutada es una menor de edad. Nada importa.
Pase lo que pase Marrufo el marino no da la cara. Marrufo no aparece. Marrufo no resuelve absolutamente nada.
Este miércoles ejecutaron a un empresario más en Tlaxcala. Pero no era cualquier empresario, era mi amigo, uno que supo estar en los momentos más difíciles de mi vida. No diré más.
Y es que para un servidor este marino está navegando horas extras en el cargo, pues desde que dejó a su suerte a personal de su dependencia a ser linchados en Zacatelco, se debió marchar, despedido y con una patada en el trasero, incluso hasta con probables repercusiones legales.
Sin embargo, eso no sucedió. Marrufo el marino sigue al frente de una secretaría que hace agua por todos lados. Marrufo sigue al frente a pesar de que Tlaxcala vive la peor situación de inseguridad en toda su historia.
No obstante que el discurso de que ¡somos…! ya sabe qué..ya nadie lo cree, incluso hasta provoca malestar entre la población, el gobierno lo mantiene sin moverle una coma, eso demuestra que no tienen la menor idea de combatir a la creciente delincuencia organizada, que se mueve como Pedro por su casa para ejecutar a quien les dé la gana ante la pasividad de las autoridades.
Hay quién dice que hasta el marino es parte del problema, cómplice de esas bandas transgresoras de la ley, como él las llama. No me consta, lo que sí puedo afirmar con certeza es que a Marrufo le quedó enorme el puesto y su gran incompetencia es incompatible con la gran responsabilidad que significa ser secretario de seguridad ciudadana.
Pero todo parece indicar que Marrufo el Marino no se irá por sí solo, no importa que el estado sea tomado por la delincuencia, no importa que la entidad arda bajo el fuego indiscriminado de las bandas transgresoras, No importa que incluso atraquen a ciudadanos en sus propias narices, Marrufo no renunciará.
Entonces aquí la gran duda es…¿Por qué la gobernadora no lo corre? Yo podría pensar que la mandamás no se atreve a hacerlo por algunas razones.
- Para no mermar más su ya de por si golpeada imagen, un nuevo secretario de seguridad solo acabaría de confirmar que desde su llegada jamás tuvo una estrategia clara del combate a la delincuencia.
- Porque para ella, dentro de su burbujota, de verdad se cree su propio discurso de que en Tlaxcala no pasa nada.
- Simplemente porque en esa área no puede decidir.
Pero si el más alto poder del estado no puede decidir a quién quitar o a quien poner en tan importante secretaría, pues sería gravísimo.
Pero más grave sería que la ausencia de estrategia de combate a la inseguridad, una más que evidente en Tlaxcala, una que es ya hoy mismo la más grande de la historia, para la máxima responsable del estado, simplemente ¡No importa!
Por cierto…¿alguien ha visto a la Fiscal? Tampoco, solo, como siempre, se abrió una carpeta de investigación.
@olaizmau
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