Caos inminente 

Por Stephany Rodríguez

La reciente instalación de botes de basura en la capital del estado ha desatado un nuevo debate entre los ciudadanos sobre la efectividad de esta medida para combatir la contaminación urbana.

En puntos estratégicos de la ciudad, como la plaza de la Constitución, ya se pueden avistar los primeros contenedores dispuestos para recibir desechos. Sin embargo, surge la preocupación de si estos serán suficientes para contener la cantidad de basura generada por los habitantes y los comerciantes locales.

En una entrevista, un residente expresó su escepticismo. Siempre que intentan implementar este tipo de medidas, parece que terminamos con más problemas que soluciones.’¿Realmente estamos preparados para hacer un buen uso de estos contenedores o simplemente se convertirán en focos de basura desbordante?’.

Otro punto de preocupación es el comportamiento de los comerciantes ambulantes y establecidos, quienes podrían no cumplir con las normativas de disposición de basura adecuada. Algunos sugieren que se implementen sanciones económicas y administrativas para aquellos que no respeten las reglas.

Sin embargo, hay quienes cuestionan si esta medida es la mejor solución para abordar el problema de la basura en la ciudad. En lugar de invertir en más contenedores, ‘¿por qué no destinamos recursos a programas de educación ambiental y limpieza urbana? ‘ se preguntó un ciudadano durante una entrevista.

Ante esta incertidumbre, queda claro que la instalación de botes de basura en la capital Tlaxcalteca no solo es una cuestión de infraestructura, sino también de cultura ciudadana y políticas de gestión de residuos.