Por Edgardo Cabrera 

Los seguidores de Morena no entienden, siguen soñando que su proceso interno es como su lema, pero en los hechos les roban, mienten y traicionan, lo vieron con la imposición de candidatos al senado y diputaciones federales, ahora con su lista de los que competirán por un escaño local, aplicaron la de: mejor malo conocido que bueno por conocer.

Precisamente en el caso de las diputaciones locales y al salir los palomeados por la Comisión Nacional de Elecciones del partido oficialista llamó la atención la inclusión en el distrito 11 de Alejandro Aguilar López, quien es candidato registrado y compite desde el 1 de marzo por el distrito federal 1 de la coalición Morena-PT-PVEM.

Una de dos, traen un completo desorden y no saben lo que están palomeando, o la otra, el huamantleco fue timado y estaría en la antesala de ser sustituido como abanderado en busca de la reelección.

De esa misma lista de candidatos morenos, en ocho de 15 distritos buscan mantener a los mismos legisladores, además llama la atención el chapulineo de partido del perredista Ever Campech y Lorena Ruiz quien renunció al PT (quien le dio la plurinominal) y así llegó al escaño, para declararse supuestamente independiente y ahora ya es escudera de Morena.

También resulta curioso dónde acabó la ex funcionaria lorenista Madaí Pérez, no pudo ser candidata al senado, tampoco le alcanzó para ser aspirante a un distrito federal y ahora intentará ganar el distrito capitalino, el 7, donde no tiene arraigo, por cierto, de forma descarada su propaganda del proceso interno por la Cámara Alta se mantiene pegada en unidades del transporte, lo que por cierto está prohibido en la ley de la materia.

Y para rematar, ya se filtró la lista de suspirantes a presidencias municipales, donde de nueva cuenta los decepcionados son más que los sorprendidos, hay reciclaje, nombres ocultos, privilegio a los acuerdos cupulares de las ex corcholatas presidenciales y de allegados a Cuéllar, aunque estén en el sótano en sus famosas encuestas ultra secretas.

Algunos de los timados ya tienen las puertas abiertas en el Verde y el PT que siguen haciendo su agosto en pleno marzo, como mejor ejemplo aparece Sergio González condenado al fracaso, pero lo “bailado” nadie se lo quita en su sueño guajiro de ser candidato.

BAJA PANISTA

En eso del proceso electoral, Morena ganó un voto en el Senado luego de que la apizaquense Maura Hernández, suplente de la panista Minerva Hernández, asumiera el cargo de propietaria tras la licencia de quien ahora busca ser presidenta municipal de Tlaxcala.

La rivalidad entre Minerva y Maura se dio en el año 2021 cuando no la llamaran a ocupar el escaño tras la primera licencia que pidió la legisladora, en aquella ocasión en busca de ser candidata a la gubernatura, lo que le valió ser acusada de incumplir acuerdos porque en la campaña de 2018 invirtió “tiempo, dinero y esfuerzo”.

Maura aspiraba a ser candidata de Morena a la alcaldía de Apizaco, sin embargo, su sueño se esfumó luego de que el partido determinó que fuera varón el género del abanderado, y al llegar al Senado se confirmó además su esfuerzo truncado en el proceso interno.

Ahora veremos si a Minerva Hernández se le hace ser alcaldesa bajo la coalición PAN-PRI, porque no es lo mismo los acuerdos y las negociaciones cupulares, a las que está acostumbrada, que sentarse a negociar con el pueblo y con aquellos que hacen política local.