Usan vallas como mural de denuncias

Por Selene Sosa

Este viernes las mujeres de Tlaxcala dieron «cachetada con guante blanco» al Gobierno Estatal que encabeza Lorena Cuéllar Cisneros, puesto que usaron las vallas metálicas para reprimir la movilización, como muro de denuncias feministas.

En conmemoración al 8 de Marzo, Día Internacional de las Mujeres, Tlaxcala se unió a las movilizaciones a nivel mundial, para esta ocasión, las mujeres tlaxcaltecas repitieron la conformación de dos contigentes para salir de puntos distintos del Municipio Capitalino para llegar a Palacio de Gobierno.

Sin embargo, la administración estatal de la electa de Movimiento Regeneración Nacional (MORENA) amuralló Palacio de Gobierno, a fin de «proteger» los muros de la iconoclasia feminista por la cual se realizan consignas y denuncias contra agresores de mujeres y de infancias.

Bajo este tenor, el contingente que partió del Asta Bandera de La Virgen, estuvo conformado por víctimas de violencia de género en todas sus modalidades, familiares de víctimas de trata, de feminicidio, de abuso sexual, de violencia vicaria, de violencia obstétrica y víctimas de desaparición.

Igualmente participaron estudiantes, docentes, trabajadoras del gobierno, sindicalizadas, madres, ambientalistas, profesionistas, mujeres de comunidades regidas por Usos y Costumbres, activistas, colectivas, niñas, niños, etcétera.

Todas con la consigna de exigir justicia, seguridad, respeto a los derechos laborales, a los derechos humanos, de acceso al agua, de acesso a la salud, entre otros, con la fuerte consigna nacida en la Marcha del 8M del año pasado, «Lorena no es aliada, es privilegiada».

Y es que, los muros colocados por la ex priísta fueron usados por las mujeres para colocar sus consignas, sus denuncias, sus preguntas ante la omisión de las autoridades estatales, incluido el Poder Judicial por medio de jueves que actúan con misoginia.

Así, luego de casi dos horas de manifestación, las mujeres en Tlaxcala culminaron su protesta, sin mayores incidencias y mostrando la civilidad sin dejar de ser punitivas en sus demandas por vivir una vida libre de violencia.