SEXENIO ROJO
1 de marzo - 2024

Por Edgardo Cabrera

Apenas en enero un puñado de funcionarios lorenistas acudieron a comparecer ante diputados locales y ahí, particularmente los encargados del tema de seguridad y procuración de justicia, dibujaron un mundo rosa, de nuevo se insistió que no hay delincuencia organizada, aplaudieron la reducción en el número de denuncias (cuando debió causarles preocupación), y, ya sabe, repitieron como loros aquello de que somos el estado más seguro del país.  

Pues la utopía se les volvió pesadilla cuando en la conferencia mañanera de López Obrador se dio un alarmante dato, durante el año 2023 se cometieron 622 homicidios dolosos, un incremento de 376 por ciento en comparación a la anualidad anterior, ¿pues no que somos un paraíso?

En el 2022, los asesinatos registrados fueron 165, una cifra similar a las de las administraciones anteriores, pero llama poderosamente la atención que en solo 12 meses la situación empeoró de forma alarmante, y las causas son múltiples, la principal, el desinterés de la triste historia, estuvieron más ocupados en la fiesta del torneo de voleibol playero que en una estrategia eficaz.

Entre esas 622 muertes están personas desaparecidas, menores de edad y mujeres, muchos de ellos fueron producto de ejecuciones, hay desmembrados, linchados, en fin, basta ver el informe de la organización “Causa en Común” que detalla las atrocidades cometidas en Tlaxcala en el año 2023. 

De acuerdo con el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, y con base en las carpetas de investigación, el incremento de 457 asesinatos entre un año y otro, develó que, aunque no se cansan de presumir que somos los más seguros, no somos los que tienen menos muertos, por dejo de Tlaxcala están Yucatán con 203, Baja California Sur con 258, Aguascalientes 397 y Campeche 420. 

Otra vez, como que las cosas no cuadran, pareciera que se están manipulando datos y escondiendo información para reducir en el escritorio la incidencia delictiva, esa es la triste historia.

INFORME SIN INFORME

En eso de las incongruencias, resulta que Cuéllar convocó a la prensa al basurero de Nanacamilpa para dar un informe “sobre los sitios de disposición final de residuos” donde no hubo tal informe, solamente palabrería y la promesa de hacer una “fuerte” inversión para atender el problema, serán 10 milloncitos de pesos, solamente para otro estudio, por cierto, aún no saben quién lo hará porque están en la licitación de la empresa. 

Recuerdan cuánto gastaron en organizar el Mundial de Voleibol de Playa el año pasado: 125 millones de pesos, de los cuales 43.5 millones fueron puestos por el gobierno estatal, el resto la Conade. 

El informe sin datos sobre los cuatro rellenos sanitarios se dio, por cierto, en Nanacamilpa, la realeza evitó acudir al basurero de Panotla, mismo que se volvió a encender la víspera.

Qué dijeron de nuevo, NADA, lo mismo de siempre, que el problema data de hace 30 años, que están “comprometidos”, que ahora sí lo resolverán, que desde que llegaron fue una preocupación (aunque esa preocupación no se reflejó en el Plan Estatal de Desarrollo), en conclusión, NADA, fue una dosis más de atole con el dedo.